"Ceguera"

En esta semana han ocurrido, a nivel general, muchas cosas que agitan nuestra vida política. A nivel personal he asistido a dos eventos que siguen dando pie a mi firme convicción de que algo serio sacude los cimientos de esta sociedad, que puede acabar en tiempo no lejano con el bipartidismo. Por un lado, fui a una asamblea de fundación de un círculo de podemos, y, por otro, he asistido a una entrevista-conferencia organizada por la plataforma "Reconstrucción Democrática" entre Jordi Évole y Juan Cruz, sobre el papel del periodismo en la democracia. De ambos eventos he sacado la conclusión de que el personal está harto, harto de ser manipulado, harto de ser mal informado y además ser el paganini de toda esta historia.

Hace un tiempo que leí una novela se Saramago "La ceguera" en la que una ciudad era víctima de esa pandemia. Con gran maestría, cargada se simbolismos, el autor nos narra los acontecimientos que resuelve con un golpe de timón, y que no desvelaré por respeto a futuros lectores. Pues bien, he recordado esa "ceguera colectiva" por su paralelismo con la que padecen los barones del bipartidismo; ceguera que no les deja ver la verdadera vida de la calle con su realidad y con sus sentimientos, y sin darse cuenta de ello, pues suponen ciegos a todos los demás, persisten en sus actitudes y proponen falsas soluciones, ajenos a que, la recuperada visión del resto de ciudadanos busca vías, se aglutina y se organiza para acabar con el dominio de los portadores de la pandemia.

Ceguera en la abdicación: Los asistentes a la reunión de la Zarzuela, donde tras el pequeño revés de las europeas, toman la decisión de acelerar la abdicación, no ven ni miden las consecuencias para sus filas de su gesto "democrático y constitucional", de acuerdo, pero de espaldas a un pueblo, que ninguneado y burlado puede tomar actitudes más críticas y enquistadas sobre monarquía parlamentaria, y más que ganar adeptos, pueda tener muchas bajas a la hora de la verdad que tarde o temprano llegará.

Ceguera en el aforamiento del ex rey: Al margen de la importancia de uno más dentro de "la casta" de aforados, no parecen darse cuenta del impacto que supone para los ciudadanos esas prisas. ¿Es que se supone que va a delinquir pronto? ¿Es que se supone que ya delinquió y le pasaran la factura? ¿Tiene algo que ver la controvertida herencia que la transparente libertad de prensa española permitió publicar en The New-York Times? ¿En qué lugar ponemos a la justicia? ¿No son justos los jueces de los tribunales ordinarios? ¿Sólo hay justicia en los altos tribunales? ¿O es al revés y dónde no hay justicia es arriba? Padecen la pandemia y suponen que los ciudadanos sólo leemos y vemos sus "prensas y sus teles" tan abiertas y tan plurales y tan "castizas" ellas

Triple ceguera en los ataques a "Podemos": Ceguera al suponer que "Podemos" es el único sector de la sociedad que se organiza contra la pandemia y no saben leer que tienen menos de la mitad de los votantes. Ceguera para no ver que la mezquindad de las descalificaciones pone de manifiesto la verdadera índole de los atacantes. Y ceguera para no ver que los competidores del "Tú más" están haciendo una propaganda gratuita de sus adversarios ya que se están desenmascarando públicamente. Bueno en realidad llevan muchos años haciéndola pero no han caído en que la ceguera de los ciudadanos es la que está desapareciendo.

Ceguera en las reuniones secretas de Toledo y sus posteriores medidas. Ceguera porque a estas alturas deben saber que las reuniones secretas nunca lo son. Ceguera porque el no reconocimiento de un problema no evita realmente el problema, y ceguera porque si las soluciones son todas como la cacareada rebaja del IRPF, en el pecado llevan la penitencia, pues una vez más, no pueden sustraerse a su servicio al gran capital y logran exactamente el efecto contrario al deseado.

En resumen, ceguera absoluta, pues lo que pudiera mitigar su caída como: Aparcar la Ley del aborto, La reforma de la justicia y Código Penal, la Reforma Constitucional previo referéndum, abordando el problema territorial, la monarquía y la Ley Electoral, La Reforma Institucional con la posibilidad de eliminación de las duplicidades (Senado y Diputaciones) y racionalización del gasto público. Reforma la Ley de bases de las Administraciones Locales con topes salariales para liberados Etc. Etc. Etc. Pero eso no se ve. Eso lo oculta la pandemia que les deja en la ceguera más absoluta para no ver no que no les interesa. Siguen con esa clara visión de que esas cosas son sólo de su incumbencia y actúan por el principio del hecho consumado. "No es el momento" dicen, lo harán cuando les venga en gana si algún día lo hacen y además, ¿desde cuando los votantes tienen derecho a meterse en estos asuntos? Lo suyo es votar que nosotros sabemos lo que conviene o no hacer.

Es decir: Ciegos, ciegos y endiosados hasta que la realidad les haga abrir los ojos, ¿o tal vez cerrarlos?, para no ver que el pueblo recupera la vista.
Continuamos.