Hace unas siete horas se ha producido un nuevo terremoto en Lima. Aunque su intensidad solo fue de 4.3 grados, la fragilidad de las marginales construcciones de algunas casas de los distritos mas pobres de la provincia, no resistieron y muchos han perdido su morada.
Es el más intenso de los temblores que Perú ha sufrido en estos días y a los que los peruanos están casi acostumbrados.
En el centro de Lima la mayoría de la gente salió a la calle, pero mientras en los distinguidos Miraflores o San Isidro, sus habitantes volvieron a sus confortables residencias, en otros sitios como S.J. Lurigancho y conos, muchos se han quedado sin vivienda.
Aunque nada tiene que ver con la situación del anterior terremoto con epicentro en Ica y que tantos muertos y desolación ocasionó este terremoto me hace pensar en la diferencia de nuestros intereses y preocupaciones. Mientras en El Apurón, discutimos sobre la Republica, La Iglesia, un señor llamado Franco que murió hace 35 años, o que solo tenemos una gasolinera para repostar de noche, la inmensa mayoría de los peruanos tienen como primera preocupación comer cada día, no poder ir al medico ya que no tiene seguro, o no perder su casa en uno de los 150 seísmos que sufren cada año.
http://www.peru.com/noticias/portada20100420/92302/Temblor-de-43-grados-de-magnitud-sacude-Lima-y-causa-alarma-en-la-poblacion
