Cuentan que un conductor escuchó por la radio: "Atención, un loco suicida circula en dirección contraria por la A-6. Extremen la precaución". A lo que el conductor contesta "¡Cómo un loco suicida! ¡Todos son locos suicidas, todos!". En estos días Zapatero ha caído en la cuenta de que circulaba en dirección contraria. Lo malo es que ha tardado mucho tiempo y se lo han tenido que decir desde el Banco de España, hasta Ángela Merkel, pasando por Barack Obama o las denostadas agencias de rating, a las que, por otra parte, hoy Zapatero ha dado la razón a sus argumentos.
A Zapatero le han obligado a enterrar su política económica porque ya no valía. A partir de hoy, el discurso del presidente del Gobierno será distinto. Atrás queda el espíritu de Rodiezmo y todo lo que ello significa. El presidente va a tener que gobernar a la contra de buena parte de la sociedad, que le echará la culpa de sus males futuros porque no supo plantear las reformas en el pasado.
Unas reformas sobre -y esto es muy grave- las que no ha aportado nada más de lo ya conocido, como la del mercado de trabajo, que sigue dejando en manos de unos agentes sociales incapaces de ponerla en marcha.
El presidente del Gobierno está tocado y lo paradójico es que está tocado precisamente cuando ha tomado las medidas ortodoxas que los mercados y las instituciones le reclamaban cada vez con más insistencia Es su culpa, por no tomar decisiones a tiempo.
Y el presidente no ha descartado subidas de impuestos…. Traducido: habrá subidas de impuestos en 2011.