Comienzan las obras de la playa y desaparecen de un plumazo cientos de aparcamientos

La obras de la playa que transformará el frente marítimo de Santa Cruz de La Palma comienzan hoy lunes y con ella desaparecen de un plumazo buena parte de los aparcamientos habilitados hasta ahora en los terrenos ganados al mar con el problema que ello supone para cientos de conductores que se se preguntan ahora dónde van a encontrar un lugar céntrico para aparcar gratis. La empresa adjudicataria, FCC, ha puesto carteles y señales anunciando la prohibición de aparcar a partir del día 3 de octubre a las siete de la mañana por el inicio de los trabajos. De momento, sólo permanecerán abiertos los aparcamientos situados frente al Cabildo.

Sin duda, el cierre de esta importante bolsa de aparcamientos en pleno centro de la ciudad preocupa a muchos ciudadanos que hasta ahora aparcaban aquí de forma gratuita para ir a trabajar, hacer gestiones administrativas o ir de compras. Los comerciantes ven también con preocupación la supresión de estas plazas pues temen que sus ventas se resientan más de los que ya están por culpa de la crisis.

Precisamente para intentar mitigar los inconvenientes que esta pérdida de aparcamientos pueda generar a la población, el ayuntamiento ha habilitado nuevas zonas de aparcamientos en distintas puntos del municipio y ha creado zonas azules en la propia avenida Marítima, donde los aparcamientos en línea se transformarán en diagonal para ganar más espacio, y en la avenida de Los Indianos, para facilitar la rotación de vehículos.

Además se va poner en servicio una lanzadera que recorrerá la ciudad para facilitar los desplazamientos y que la gente pueda dejar el coche sus casas o en zonas como Benahoare o Pescadores donde hay disponibles numerosos aparcamientos que suelen estar libres durante todo el día.

El ayuntamiento está ultimando también la contratación de una obra en un solar municipal para habilitar 56 plazas de aparcamientos en la zona del Marquito. Asimismo, tienen previsto eliminar un carril en la calle Vega Monroy para que se pueda aparcar en diagonal. Además, se ha solicitado un permiso al Cabildo para crear una bolsa de 30 aparcamientos en la avenida de Bajamar, en el límite con Breña Alta y también se está estudiando la viabilidad del sistema de taxi compartido que funciona en municipios como Candelaria (Tenerife) con éxito. También la Asociación del Casco Histórico y el párking han puesto en marcha una campaña para incentivar el uso del parking de El Puente.

El objetivo de todos es que las obras afecten lo menos posible a la actividad diaria de la ciudad, pero el cambio ya se intuye y muchos temen las consecuencias. A partir de este lunes se verán.

Ayer por la tarde, algunas personas contemplaban con nostalgia el mar desde el malecón y desde estos aparcamientos conscientes de que van a desaparecer para siempre y de que, si no surgen inconventientes, en 18 meses y con una inversión de 25,3 millones de euros aportados por el Estado, se transformarán en una gran playa que políticos, empresarios y muchos ciudadanos coinciden en que supondrá una oportunidad para la ciudad.