Los pajaritos

El pasado miércoles, 17 de octubre, en el curso del acto inaugural del XIX Concurso Internacional de Canarios de Postura, celebrado en las dependencias del Recinto de Ferias y Congresos de Santa Cruz de Tenerife, el presidente del gobierno de Canarias, Paulino Rivero Baute, pronunció el que tal vez sea el discurso más conmovedor y emotivo de cuantos ha hecho desde que hace treinta años empezara a desempeñar cargos públicos.

            Dada la brillantez y la trascendencia de sus palabras y el contenido de dicho mensaje, a continuación pasamos a reproducirlas casi en su integridad, con el fin de que, al menos, sirvan de estímulo y consuelo para estos tiempos difíciles, de ajustes, sinsabores, protestas y rencores varios [y en los que un treinta y tres por ciento de la población de estas Islas carece de trabajo y más de ciento veintitrés mil hogares no tienen ingresos por este concepto]:

            "Pero quiero aprovechar esta ocasión para, en primer lugar, felicitar a los organizadores, por este nuevo concurso que tiene lugar en este año y que hoy inauguramos oficialmente.

            Y esto no es fácil. En unos momentos, en unos tiempos, que son tiempos de gran dificultad, de gran insolidaridad, de mucho egoísmo, no es fácil encontrarnos a un puñado muy importante de hombres y mujeres sensibles, solidarios y sensibles. Porque no hay nadie más sensible, más solidario, que pueda entender los problemas de los demás, que aquellas personas que, por ejemplo, están enamoradas y cuidan a los pajaritos.

            Sí, porque eso es una sensibilidad especial y las sensibilidades que empiezan por ahí se trasladan y se proyectan en el conjunto de actuaciones en la sociedad y estamos necesitados de cosas de esta naturaleza.

            Me parece sumamente importante, desde el punto de vista por lo que significa una cultura, por lo que significa para nosotros como un elemento identitario canario cuando ponemos en valor, por ejemplo, el canario, una cosa de las nuestras y por lo que significa, en definitiva, esa aproximación a la naturaleza, a esa sensibilidad especial que nos hace falta a la sociedad. Este tipo de cosas nos ayudan a conseguir o a trabajar para conseguir o a empujar todos en una dirección, que es conseguir una sociedad un poquito más humana, un poquito más sensible, un poquito más respetuosa con todo lo que nos rodea".

            Que así sea.