A Raffaella Carrà
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Hace tiempo que mi cuerpo
andaba loco, andaba suelto y no lo podía frenar…
Ah, ah, ah, ah, y no lo podía frenar…
Por las noches me despierto
abrazado a la almohada y con deseos de cantar…
Ah, ah, ah, ah, y con deseos de cantar…
¿Será que ya huelo la pena?
Calvente, Calvente, no sé.
¿Será que me espera la trena?
Calvente, Calvente, no sé.
¿Será que Rasputín tiene a otra
y que sus fuerzas agota
y está harto de amar el nota?
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Hace tiempo que mi cuerpo
está desierto de besos y El Chepas me quiere callar…
Ah, ah, ah, ah, El Chepas me quiere callar…
Premio para el caballero
que me unte primero,
no se arrepentirá…
Ah, ah, ah, ah, y no se arrepentirá…
¿Será que han puesto precio a mi pellejo?
Calvente, Calvente, no sé.
¿Será capaz el tipejo?
Calvente, Calvente, no sé.
¿Será ministro del Interior Villarejo
gracias a ese peludo pendejo
que es todo lujuria y mal rejo?
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Calvente, Calvente, eo
Calvente, Calvente, oa
Hace tiempo que mi cuerpo
está harto de amenazas y ahora quiere contestar…
Ah, ah, ah, ah, ahora soy yo el que te va putear…
Y todo el mundo se va a enterar
de qué clase de chusma es el marqués de Galapagar…
Ah, ah, ah, ah, ahora verás lo que es tragar…
Sin parar y sin poder respirar…
Que te espera un otoño caliente,
Chepao, y no un pubis ardiente,
que ya no engañas ni a Vicente
Vallés, porque eres muy mal cliente
y mu’ mala, mu’ mala gente…
Que contigo tutti populi está hirviente…
Caliente la gente, eo
Caliente la gente, oa
Caliente la gente, eo
Caliente la gente, oa