Dedicado con mucho cariño a mi abuela María Jesús, que deseo que esté celebrando su cumpleaños junto a su esposo, José Amaro, y su hijo Federico en un lugar mucho mejor que éste. Espero
"La razón por la que no has sentido el amor es porque no existe. Lo que llamas "amor" fue inventado por tipos como yo para vender medias… Naces solo y mueres solo y este mundo sólo te impone un montón de reglas que te hacen olvidar esos hechos. Pero nunca me olvido. Vivo como si no hubiera mañana, porque no hay"
Don Draper
Este es un país miserable en un mundo desdichado. Es cierto que nunca se había vivido tan bien como ahora o como una portavoz de la ONU explicaba el otro día: nunca antes se habían respetado tanto los derechos humanos como en este preciso momento. Después de varios miles de años intentando caminar erguidos sobre las dos extremidades inferiores, estaría bueno…
Aunque tampoco es que se haya avanzado mucho.
Por doquier, como en un cuerpo que supura sangre por múltiples heridas, aquí y allá saltan a cada minuto las alarmas (un bombardeo, un éxodo masivo, un desfalco millonario, una pandemia incontrolada, una ejecución pública, una red de explotación sexual desarticulada…) que son los síntomas que revelan que, pese a que lo neguemos con obstinada persistencia, no somos más que una especie enferma, que se arrastra, con poca dignidad, eso sí, hacia una segura extinción.
Las vergonzosas y mezquinas maniobras de nuestro gobierno (que es como el castigo de Sísifo que, en nuestra sadomasoquista condición de pueblo gregario y desengañado, nos hemos autoinfligido en una suerte de absurdo suicido colectivo) para traer a España al sacerdote Miguel Pajares e intentar que, primero, la factura la pagase la orden religiosa a la que éste pertenecía para, a continuación (previa soflama de la oposición socialista), rectificar y asumir todos los gastos del inútil tratamiento médico del misionero, indican que la absoluta falta de integridad moral y de decencia cívica de estos mercachifles, estraperlistas y charlatanes de tercera, metidos a gestores de la cosa pública, no conoce límites.
Todo resulta terriblemente vomitivo: la llegada del muerto viviente, el aislamiento al que fue sometido (con una puesta en escena más propia de un episodio de Expediente X que de la medicina del siglo XXI), el desalojo de todo un centro hospitalario para albergar al infeccioso y la posterior incineración del cadáver (como si se tratase de una apocalíptica criatura alienígena), lejos de cualquier ser humano que hubiera o hubiese sentido verdadero afecto por el fallecido; las escandalosas condiciones higiénico-sanitarias en los países africanos; el nuevo fármaco que ha desarrollado un laboratorio estadounidense y que comienza a utilizarse justo cuando el enésimo rebrote del ébola (que es un nombre bellísimo para designar un misterio de escalofriantes implicaciones que más vale no desencriptar) coincide en el tiempo (¡oh, causalidad, mi casualidad!) con la última entrega de la carnicería judeo-palestina, el arrebato ultranacionalista de Putin (¿quién dijo que Stalin había muerto si ese malnacido no ha dejado de engendrar bastardos una y otra vez, una y otra vez?) y la escalada imparable del integrismo islámico en Irak.
Definitivamente, el hombre es un animal que no merece una segunda oportunidad. Es una bestia atroz, cobarde, repulsiva, sin posibilidad de salvación.
No nos llamemos a engaño. No seamos idiotas. Ni Miguel Pajares, ni Chantal Motwameme, ni Georges Combey, ni mi abuela Manola, ni mi abuelo Anelio, ni tanta gente, anónima en su mayoría, que merece la pena son de nuestra tribu. Entiendo (porque no hallo otra explicación sensata) que alguien, con una capacidad infinita de comprensión y misericordia, decidió hace muchísimo tiempo enviárnoslos a este infierno insoportable, para darnos, al menos, la esperanza de creer los unos en los otros, que es donde residen el único poder y la única gloria.
cosmonauta
Gracias señor niebla..Le mando un abrazo.
Leer más
maximopt
Cayó de un árbol y en su triste espera
fue labrando a mordiscos toda suerte
defendiendo su vida con la muerte
su mañana fue siempre una quimera.
No es de extrañar que el yo siempre estuviera
callando el corazón frente a la mente
y en la supervivencia del mas fuerte
a muchos el amor se les perdiera
imposible que hoy se pretendiera
que el poder lo ocupara el corazón
para que todo muy distinto fuera
pues hoy, ayer, y como siempre era
constantemente tenemos
la razón
bailando entre el yo quiero y yo quisiera.
Leer más
jacarrillo
Muchas gracias, Pedro Luis.
Leer más
PedroLuis
Mientras tanto, con tanto desencanto, uno intenta buscar consuelo en los colores del fútbol… y, al menos esporádicamente, algunos los encontramos. Unos más que otros, como siempre. Enhorabuena.
Leer más
pevalqui
La irracionalidad humana no tiene límite. Los poderes económicos, tampoco.
Hasta luego
Leer más
arodriguez
Hace tres o cuatro meses aparecía de vez en cuando en los periódicos digitales, en un pequeñísimo recuadro a la izquierda y muy abajo, alguna que otra mención diaria del avance del ébola en África. Poco a poco, a medida que pasaban las semanas, ese recuadro se ha ido haciendo más grande, y justamente cuando cayó enfermo el señor Pajares se ensanchó con titulares a toda página. El ejemplo demuestra que en el ejercicio libre del periodismo se relativiza todo: todo se estira o se encoge como un chicle que se masca y se tira a la basura. Demasiado silencio en torno a un hecho tan importante. ¿De qué modo se informaría sobre el desbordamiento del ébola si se produjese en otro continente?
Leer más
NIEBLA
Hace tiempo que leo este periódico pero nunca había querido participar
en el día de hoy me he decidido a hacerlo para felicitar al señor cosmonauta por sus excelentes comentarios siempre rebosantes de cultura, valentía y honestidad.
muchos saludos.
Leer más
PedroLuis
Sr. "Pintao", nos trae recuerdos entrañables y "menos entrañables". En la época del Instituo de la Calle Real, aún no había cogido nunca el barco. Las visitas al muelle eran para ver esa "enorme grúa", de la mano de mi padre.
En el Instituto de la Calle Real, nos examinamos de Ingreso de Bachillerato. Luego, los exámenes libres del "Bachillerato Elemental" que estudiamos en la Academia de doña Carmela, en Mazo, ya los hicimos en el Alonso Pérez Díaz de la Plaza de Santo Domingo.
El otro día, en una de mis frecuentes visitas a La Palma, mi hermana me tenía preparada una sorpresa: primorosamente encuadernado me encontré el "Título de Bachiller Elemental", que creía extraviado. Lo había guardado mi madre entre sus cosas. En alguna ocasión me llegó a decir: "perdido no está, ya lo encontrarás". Imagínese la emoción.
Ya lo era, pero ni que decir tiene, que ha pasado a ser "mi título preferido". Creo que fue el más sacrificado, el más anhelado, y el que con más ilusión recibimos, entre huertas de tabaco y morros con brezos y tagasastes.
Nos tomaremos ese vaso de vino. No lo dude. Salud y suerte.
Leer más
Pintao
A mediados de la época de los cincuenta, gracias a Dios y a Venezuela, el número de muchachos que en La Palma pretendíamos estudiar bachillerato, se multiplicó de tal modo que conseguir plaza en el Instituto de la Calle Real era labor imposible, y bastantes padres se las ingeniaron paro que sus vástagos aprendieran más que ellos, con la lógica salida de Tenerife.
Pues bien Don José Amaro, su actual artículo me trae a la memoria, lo mismo que a algunos miles de palmeros, muchas mañanas aclarando el día, cuando el correillo de turno enfocaba la bocana del Puerto, y entre las brumas aparecía la ferrugienta mole de la grúa Titan, un elegante señor de bigote entrecano y impecablemente vestido de azul marino, trepaba con agilidad por la escalerilla de cuerda para subir por la borda, labor que a veces no sería fácil dado el balanceo de la nave, y con mano firme colocaba al barco en el medido atraque destinado para ello. Ese señor si no me equivoco era Don José Amaro Senior.
Si antes con nostalgia, ahora con tristeza, también recordamos el último adiós al amigo Fico, cuando la tristeza del templo, contrastaba con la alegría exterior propia de los muchos festejos de las fiestas lustrales, que resonaban por todas partes.
Ahora bien, conociendo al amigo, seguro que le hubiese parecido hasta apropiado: "Ahora amigos míos, se van Vds. a tomar unos vinos a mi salud, que de aquí a la calle trasera no es tan lejos, y se me dejan de coñadas."
Cordiales saludos.
Leer más
cosmonauta
ODISEA 2001 EN EL ESPACIO
———————————————
Con su comentario me ha hecho usted acordar del magnifico libro del escritor y científico británico señor Arthur Clarke fallecido hace muy poco a los 90 años de edad.
Fue llevado a la pantalla grande por el genio del septimo arte señor Stanley Kubrick con gran maestría ¿ se acuerda usted cuando los primeros humanoides no se si eran pitecantropus, o eran homosapies comenzaron a experimentar sus armas de ataque utilizando huesos de otros animales ?
Pues si señor desde ese comienzo las agresiones no han parado nunca mas en este hermoso , castigado y depredado planeta.
Saludos.
Leer más