A Diego Armando ‘El Pelusa’ Maradona, porque las comparaciones son odiosas y, en este caso, además, constituyen una sonrojante blasfemia
Será difícil de comprender
que a pesar de estar hoy aquí, en Qatar,
soy del pueblo, jamás lo podré olvidar
y solo a mí y al Papa debés creer.
Mis lujos son solamente un disfraz,
un juego burgués, para alguien incapaz
de cambiar las reglas de este negocio
y que ha hecho milmillonario a un idiocio.
Siempre sobre el verde césped plantado
como un Mustang aparcado
y con moverme tan solo un ratito
hago lo justo para ganar el partidito.
No llores por mí, Argentina.
Mi alma está contigo,
mi vida entera te la dedico,
de mí no te alejes, te necesito.
Jamás poderes ambicioné
y mentiras dijeron de mí,
que a nadie un chavo robé
ni impuestos evadí (ji, ji, ji).
Mi lugar vuestro es, por vosotros sudé
la albiceleste, masqué chicle y mil veces esputé.
Ahora, cumplida mi sagrada misión, abro la ventana
y paso a hacer lo que me da la gana.
No llores por mí, Argentina,
mi alma está contigo,
mi vida entera te la dedico,
de mí no te alejes, te necesito.
Jamás poderes ambicioné
y mentiras dijeron de mí,
que a nadie un chavo robé
ni impuestos evadí (ji, ji, ji).
Qué más podré decir
para convenceros de mi verdad.
Si aún querés dudar, mirá, bobos, mirá mis ojos
que de no dormir los tengo rojos.
No llores por mí, Argentina,
mi alma está contigo,
mi vida entera te la dedico,
de mí no te alejes, te necesito.
No llores por mí, Argentina,
que lo que de mí digan me patina
y todo me importa un pito.
Viirtual
Ay, Carrillo, Carrillo, qué bien hubieras quedado con una rectificación sobre D10S MESSI!
Adiós y bendiciones.
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