La pregunta es si realmente nuestra autonomía ha servido para construir Canarias o más bien para establecer y perpetuar situaciones de insatisfacción y enfrentamiento entre islas capitalinas e islas llamadas menores. El Cabildo de Gran Canaria se queja de la beligerancia de los políticos de allá, que son todos de la misma fuerza y por tanto reman a golpe doble. Gran Canaria tiene un electorado sin ideología, que históricamente es capaz de dar mayorías absolutas a UCD, al PSOE y al PP, así como de expresar gran apoyo a una fuerza nacionalista de izquierda como fue UPC, Unión del Pueblo Canario, con políticos como Manuel Bermejo, el alcalde, o Sagaseta, el diputado. En el Cabildo grancanario ha habido recientemente presidentes del mismo partido pero claramente antagónicos entre ellos: María Eugenia Márquez, José Macías, José M. Soria y José Miguel Bravo de Laguna. Y siendo antagónicos difícilmente podían construir una línea de continuidad, difícilmente podrían establecer prioridades y objetivos. Gran Canaria no tuvo la suerte de contar con agrupaciones de carnaval en los barrios, que hábilmente engarzadas por Manuel Hermoso, dieron pie a ATI y, de ahí, a Coalición Canaria, un partido político que, pese a retroceder electoralmente, siempre gobierna. Dadas las bondades de nuestro prodigioso sistema electoral, da igual que sea la segunda, la tercera, la cuarta o la quinta fuerza en votos: siempre va a estar en la cúspide, de la misma forma que en El Hierro o La Gomera un diputado se saca con poco y en las islas capitalinas exige mucho. También se ve con estupefacción que los presidentes autonómicos sean de Tenerife desde Adán Martín para acá, con Paulino Rivero, dos mandatos, y ahora con Fernando Clavijo. Parece ser que en el Estatuto de Autonomía se establece que ningún político de Lanzarote, La Palma o Fuerteventura pueda llegar a presidir el territorio. ¿No estaba establecido que habría una rotación en cada legislatura? Lo mismo sucede con la ley de sedes, que ha permitido engrosar los funcionarios y los servicios en un sitio y desmantelarlos en otro. Las principales consejerías radican allá, las minucias aquí. Es un tema recurrente y en la tertulia del mediodía del veterano y hábil Jorge Alemán, en UD Radio, estuvimos debatiéndolo J. Fraguela, Victoria Sabroso, Rosario Valcárcel y yo mismo.
La continuidad política en Tenerife ha permitido el despegue de infraestructuras y servicios. En la TV Canaria los informativos y los espacios que generan opinión tienen su sede allá, la evasión y el divertimento radica acá. No tenemos una buena educación, nuestra sanidad se acerca al tercermundismo, el paro juvenil es estratosférico pero podemos estar orgullosos de nuestra Superburocracia. En esta autonomía hemos construido una clase funcionarial que ha creado una administración compleja, duplicada y hasta triplicada, con conflictos entre las distintas administraciones. El ideal es hacerse funcionario, un sueldito seguro para toda la vida. Y el entramado generado es casi una aberración, el vuelva usted mañana de Larra multiplicado por diez, el pasarse la bola entre unos y otros. Los gobernantes, eufóricos, creen que ya cumplen creando un batiburrillo de leyes y normas reguladoras, una enorme maraña legislativa, cuyos beneficiarios suelen ser los bufetes de abogados y altos funcionarios, secretarios municipales, interventores, etc. que interpretan las leyes y adquieren un poder similar al de los grandes sacerdotes en Egipto.
Lo advirtió Jerónimo Saavedra cuando se despedía de su cargo de Diputado del Común, pues solicitó cambios legales que permitan reformar la administración, y evitar así el solapamiento de competencias autonómicas, insulares y locales. Habló de situaciones lamentables y catastróficas de duplicidad, que incluso se han traducido en pérdida de fondos para la dependencia. El paraíso subtropical es un disparate, una maraña clientelar. Tenemos profesores en paro, médicos mal contratados, escasez de personal sanitario, tenemos varias plantas cerradas en el Hospital Doctor Negrín, tenemos unas listas de espera tercermundistas y, en cambio, disponemos de una legión de sabios cuyo primordial cometido mañanero podría consistir en tomar las cosas con calma. Hubo una dirección general del Libro que duró una sentada, estas cosas no interesan. Los funcionarios son la casta que nos dirige, y disfruta la vida en vuelos de Binter y/o helicóptero presidencial. De estos temas se habla poco porque son políticamente incorrectos y sería demencial hablar del abuso de poder, la negligencia o las dilaciones.
En resumidas cuentas, Canarias no está construida. Pues después de los años de ilusión, en que ciertamente hubo políticos con visión de la historia y del paisaje como Jerónimo Saavedra o Adán Martín, han llegado los tiempos de las rebajas. Apenas existe esta tierra como ente territorial, pues es un ente mal cosido, mal enhebrado. Recordemos que archipiélago no significa muchas islas juntas sino muchos mares juntos, mares a veces encrespados, venenosos a raíz del endémico pleito, que tan sabiamente aprovechan algunos. Donde nadie es capaz de construir una ley electoral acorde con la sensatez, donde hay conflictos entre la doble y la triple paridad, donde unos se alían contra otros.
Antonio Morales, hombre al que tengo por honesto y comprometido con la cultura, se propone una lista de inversiones, pero no puede contrarrestar el enorme empuje de otros. Atacado por el resto, resiste como puede. Pues parece imbatible el triunvirato compuesto por Fernando Clavijo, presidente regional; Carlos Alonso, presidente del Cabildo, y José Manuel Bermúdez, alcalde capitalino. Rezuman ambición y aúnan proyectos de grandeza, estrategia, liderazgo y dinamicidad. Este trío de tenores canta con mayor fuerza, cuentan con apoyo mediático de la TV autonómica, donde, por cierto, la promoción y la propaganda siempre va del mismo lado. Hay que añadir que Gran Canaria, por ser la primera isla turística, cometió el error de primar los establecimientos extrahoteleros. Tenerife, que vino después, fue directamente a los hoteles de cuatro y cinco estrellas. Y las moratorias impiden que en otras islas se construyan ahora esos establecimientos de calidad. El poder económico grancanario, su puerto y su recaudación de impuestos, han sido evidentes pero el liderazgo turístico ha cambiado, como consecuencia de que el liderazgo político lo hizo hace mucho tiempo. Poco puede hacer Antonio Morales si por debajo hay una lucha a cuchillo por las infraestructuras, los puertos y aeropuertos, los trenes y los tranvías, las autopistas y todo lo demás. La isla redonda tuvo que luchar mucho por una cosa que parecía elemental: una universidad. Sobre la mesa las reivindicaciones de las llamadas islas menores, que necesitan mejorar en educación, en sanidad, en equipamientos y servicios. Y las Islas Verdes claman por mayores conexiones aéreas y marítimas, así como una legislación que les permita desarrollarse en turismo de manera razonable, para no perder el tren. En definitiva: casi nadie está contento.
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Pintao
Sin duda debe ser normal que a medida que se van cumpliendo años va uno teniendo una mejor perspectiva del panorama en el que habita, pues no en vano y como suele ocurrir, va uno teniendo más puntos de referencia.
Yo estoy convencido que Canarias ha dispuesto en los últimos cuarenta años de unas magníficas oportunidades que no ha sabido utilizar con provecho de cara a conseguir un mayor y más equilibrado desarrollo y bienestar.
Esto me da un poco de miedo de cara al futuro, pues, valen muchos ejemplos, y uno que ahora me viene a la cabeza es el de la “parábola de los talentos”, que sin duda la Biblia como libro muy antiguo que es, destila sin duda muchos principios sabios .
Hemos recibido “talentos”, pero como pueblo joven que somos, (y historicamente bastante atrasados), el provecho a dichos talentos se lo llevan los más astutos, que en las sociedades inmersas en la modorra, suelen arramblar por los beneficios en beneficio propio, con olímpico desprecio por “el común”, mientras en vez de mirar al futuro con profundidad, sólo fijemos la vista en la punta del dedo.
Recuerdo hace más de treinta años que un amigo político inteligente y buena persona y a propósito de la por entonces discutida “progresista ley de aguas”, me decía: “No esperes que esto llegue a buen puerto, pues al final verás que a las gentes del común terminarán por convencerlas de terminen prefiriendo justo lo contrario de lo que a la larga sería un importante punto de inflexión. Te convencerás que como pueblo no somos muy diferentes que nuestros hermanos centroamericanos. Somos un pueblo joven y fácil de engañar con cualquier señuelo”.
Así que yo esperanzas, las justas.
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FrodoBorbon
Juanf: Creo que hay un hilo para hablar de Venezuela. Si no lo hay, créelo. Es mejor que usar Venezuela cuando se están denunciando cosas de AQUI.
Venezuela está jodida, pero no vale para justificar que AQUI no cambie nada. ALLÍ tienen un problemón. AQUÍ vamos camino de tenerlo.
AQUI, las cosas no van bien; nada bien… para la mayoría. Para unos cuantos sí. El trabajo escasea. El contrato fijo dejado de existir… Los sueldos han bajado, mientras los precios de la luz, la gasolina, el butano, LA COMIDA, los precios en general: NO PARAN DE SUBIR. No sé qué pasa con los plátanos que tienen que estar subvencionados (tilín tilón, quién se lleva el pastón)…
Pan para hoy, y hambre para mañana… AQUI!
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Juanf
Don Luis, la comodidad mirando desde el balcón con un cafecito y rosquilla es lo mas fácil del mundo, aquello de que no comento porque no quiero problemas también es cierto, que se moje el vecino que parece de mal temperamento, tiempos ya pasados y viviendo en un cuarto piso sonó el golpe de agua en la piscina de nuestro edificio, cosa natural pero en ese momento no era lógico por ser las tres de la mañana, y yo comencé a reír y mi señora me pregunta por que reía, le dije por la calentura que se va a agarrar el del quinto piso que es muy bravo… y seguí durmiendo, uno toma las cosas tal cual vayan sucediendo y define lo que mas le conviene.
Su articulo de hoy de forma moderada nos deja una vez mas saber que no todos vamos por el progreso de los demás, se llega con buena intención y se termina con el cansancio de acumular.
I don’t know who my grandfather was;
I am much more concerned to know
what his grandson will be.
Abraham Lincoln
Las puñeteras de la patria
Pensando con Cesar Vallejo
Antes de que brinque una chavista primaria, defino el calificativo puñetero: Que molesta o incordia, Que tiene mala intención, Que causa dificultades, Que expresa hostilidad (Diccionario de la Lengua Española) … Una vez aclarado, comienzo a discurrir sobre las puñeteras de la revolución.
Es necesario confrontar la realidad, para entender las conductas de Tibisay Lucena y sus miserables del CNE, la de Cilia Flores, Iris Varela, Tania Díaz, Delcy Rodríguez, Jacqueline Faría, Eva Golinger o Blanca Eekhout, quienes entre otras, se han convertido en los “heraldos negros” de que hablaba Vallejo.
Cada vez que Maduro viola la Constitución, un guardia mata un joven venezolano, una marcha pacífica es disuelta a fuerza de gas lacrimógeno y disparos. Cuando impiden una elección constitucional o los venezolanos se quejan por las interminables colas, buscando algo que comer, brinca rauda una de ellas para apoyar cínicamente, el abuso de poder del régimen dictatorial.
Sin importarles el sufrimiento del que busca un mendrugo en la basura o el cadáver de su hijo en la morgue; ignorando el dolor de un padre que, confinado en una celda, no puede ver su hijo crecer; ni el de la madre que ve caer en el pavimento su hijo, a través de una pantalla de televisión. Porque “Hay golpes en la vida, tan fuertes… ¡Yo no sé!… como del odio de Dios; como si… la resaca de todo lo sufrido se empozara en el alma…”.
Presentan características comunes de resentimiento social, psiquiatras chavistas dirán que son víctimas de la sociedad ¡Yo no sé! Lo que compruebo es que, convertidas en monstruos insensibles, no muestran ningún rasgo de humanidad por el pueblo venezolano. El partido rojo, su permanencia en el poder, el servilismo a Raúl Castro y a una ideología fracasada, es su única razón de ser y actuar, carecen de valores morales, no creen en la justicia… ni en la libertad… ni en la democracia.
En estas horas cruciales, he visto jóvenes heridos, cuerpos lacerados, por aquellos, que ellas sin remordimiento defienden. Vallejo hubiera podido escribir algo así “Esta tarde es” triste. “¿Por qué no ha de ser? Viste gracia y pena; viste de mujer”.
Cilia Flores encabeza la lista, es la reina del nepotismo, es proverbial la cifra de familiares que enchufó en cargos públicos, representa el poder detrás del trono, conspira más que él inútil y cual viuda negra teje sus redes.
Es cómplice de traición a la patria, si es preciso, la primera combatiente se inclina ante la imagen de Fidel, pero ni así salvará a sus sobrinos narcos, quienes producían fondos para financiar su campaña.
Es caradura e inconmovible, será recordada bailando salsa con su voluminoso marido, mientras el país se desangraba.
El segundo puesto le corresponde a Tibisay Lucena, ella y sus compinches tienen sangre en sus manos, César Miguel Rondón la describió: “Se le ve demasiado la costura, la trampa y la marramucia”.
Se desaparece, retrasa los lapsos para impedir elecciones, organiza el fraude electoral y tiene la pretensión de ilegalizar los partidos políticos opositores. Es responsable que en Venezuela se haya impedido una salida pacífica…aunque se haga la loca tiene que pagar, confiamos en que Dios la mantenga entre nosotros para verla cumplir condena.
Junto al TSJ, son corresponsables del golpe de estado a la Constitución… encima se ofende, cuando le cantan las verdades.
De la inefable Iris Varela, es poco lo que queda por denunciar. Es el funcionario más irresponsable del régimen, con ella ni los presos tienen asegurada la vida.
La intima de los pranes, les permite entrar y salir libremente de los centros penitenciarios, para que cometan sus delitos. Nada sorprende con ella, reconoció haber confiado a un grupo de detenidos, someter a otros alzados dentro del penal; la masacre terminó con 130 muertos, imágenes aterradoras de cuerpos decapitados y desmembrados que, por carecer de conciencia, no le producen ni frio ni calor.
El personaje femenino más detestable de la dictadura, tuvo la osadía de tildar de “arrastrada” a la esposa del preso político más emblemático, Leopoldo López, Tintori una reconocida activista de los derechos humanos.
La diputada oficialista Tania Díaz, pretende que lo que pasa en las calles de Venezuela, es una realidad aparente creada por la oposición.
Delcy Rodríguez, lo más vergonzoso que hemos tenido como Canciller, ejecutó paulatinamente sus instrucciones para aislarnos en el ámbito internacional. El odio que la habita, es producto de la muerte de su padre, famoso secuestrador de la época democrática.
Delcy Eloína es la persona que Chávez mandó a botar por tracalera, profetizándole que no sobreviviría a la revolución.
La Ministro Carmen Meléndez, la almiranta como dicen los chavistas, es la deshonra femenina del uniforme militar. Aunque haya sido superada con creces por sus colegas masculinos. Juró defender la Patria y los venezolanos, terminó convertida en agente de un partido político.
La descarada Jacqueline Faría, cobró por un puesto que no existe en la ley “jefe del Gobierno del Distrito Capital”, usurpando funciones del Alcalde Ledezma; afirma ser una guerrera para “preservar lo logrado en revolución”, imagino se refiere al capital que le quedó, por no haber limpiado el Guaire. La recordaremos por haberse burlado de los venezolanos, los que tuvieron que atravesar el inmundo rio, para salvarse de guardias y policías que les disparaban y por celebrar como “sabrosas” las colas que la gente hace en búsqueda de alimentos y medicinas.
La ministra para la mujer, Blanca Eekhout, no tiene límites de decencia, acusa a la oposición de la escasez de medicinas, aseguró en Ginebra que Venezuela es ejemplo en el tema de Derechos Humanos, que Maduro es garante de la paz del mundo y que la delincuencia en Venezuela es producto de agentes extranjeros. Aunque igualmente afirma que la entelequia anticonstitucional que pretenden imponer, “el Parlamento Comunal”, tiene que adaptarse “a cualquier escenario de lucha”.
Eva Golinger, la que vive de hacerle lobby al chavismo, La Patilla la califica: “mercenaria de Chávez en los EEUU”. Son muchos los guisos que esta chavista no puede explicar. ¿Cómo obtuvo nacionalidad venezolana? ¿Cómo sin cotizar salarios a la seguridad social de Venezuela consiguió un préstamo para comprar un apartamento en Caracas, de 400 millones de bolívares?
Son muchas más, acuérdense de Susana Barrientos, la juez-verdugo de Leopoldo, la que compró un puesto silenciando un delito, la que vendió su conciencia condenando a un inocente, o la inspectora de Tribunales, Marielys Valdez, quien justifica que civiles sean juzgados en tribunales militares.
Identifícalas, son las puñeteras de la revolución, tan diferentes a las valientes que están en la calle… que están dejando trozos de si, luchando por la libertad de Venezuela.
Son las mensajeras del dolor, “Son pocas; pero son. Abren zanjas oscuras en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte. Serán tal vez los potros de bárbaros atilas; o los heraldos negros que nos manda la Muerte”.
Nelson Castellano-Hernández
Ex Cónsul de Venezuela en París
nelsoncastellano@hotmail.com
http://www.noticierodigital. com/2017/05/nelson-castellano- hernandez-las-puneteras-de-la- patria/
Envoyé à partir d’Outlook
13 Mayo, 2017
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