Quiero hablarles de un libro que probablemente no van a encontrar fácilmente en las librerías, salvo en la propia isla de La Palma. Una edición modesta, aunque bien trabajada tipográficamente y con buenas ilustraciones.
Son 17 páginas de texto, que contienen el cuento Entre Queens y Brooklyn, de Sandra Lorenzo, ilustrado por Javier Sebastián. Con ese trabajo la autora ganó el primer premio del XVIII concurso de narrativa Luis Sánchez Brito 1913, en Tazacorte, un premio también humilde pero que está creciendo.
Sandra se define como "luchadora, versátil y proactiva." Nacida en San Andrés y Sauces, licenciada en Pedagogía por la Universidad de La Laguna, ha colaborado en distintos medios y ha obtenido diversos premios de poesía. Aficionada al mundo del cine, emprende diversos proyectos. Por su parte, el ilustrador es dibujante nato y autodidacta en diseño gráfico, técnico superior en artes gráficas publicitarias y actualmente continúa su formación en la Escuela de Arte Manolo Blahnik.
Lo que quisiera resaltar es la sensibilidad, el talento y la soltura narrativa de esta joven que hasta ahora se había dedicado a la poesía y que ahora, en su primera irrupción narrativa, trae una prosa fresca y vital, con un gran sentido del ritmo. Pese a su brevedad, este librito es un soplo de aire revitalizador, que tan solo muestra levemente las capacidades que la autora será capaz de despertar en un futuro próximo. Fue Rosario Valcárcel quien primero se fijó en esta joven escritora con tanto camino por delante.
Los ángeles caídos podrán ponerse en pie, y el sufrimiento será relegado mediante la pasión y la entrega. Los letraheridos no pueden soslayar su compromiso de hacer su obra más allá de los momentos bajos que siempre salen en el camino. Escribir en lugares pequeños exige una gran dosis de firmeza personal y una capacidad de lucha más allá de incomprensiones o murmuraciones. "Para regresar del infierno debes primero reconciliarte con la vida; pocas veces más verás la luz, pero, cuando la veas, la apreciarás más que el resto de los mortales…" (página 9)
Sandra tiene intuición y capacidades. Ahora solo falta que, con su constancia, vaya ganando públicos más amplios.
PedroLuis
Qué bien.
Escribir para sobrevivir… o para "ver la luz" que no miramos la mayoría de los mortales. Porque no se sabe o se goza de esa "dosis de firmeza personal y capacidad de lucha" imprescindibles.
Enhorabuena a Sandra. Gracias a don Luis, que sí sabe ver la luz, y trata de mostrárnosla a los tuertos.
Leer más