Los ciudadanos de esta isla denuncian la falta de asistencia de sus mayores.
Las largas listas de espera son cada vez más grandes pues nuestra población geriátrica aumenta y a esto se suma la lentitud en la ocupación de las camas que van quedando libres. Así mismo denuncian el dudoso criterio que se sigue en la valoración y confesión de dichas listas así como, que siempre resultan más favorecidos aquellos que están apadrinados por el político de turno o respaldados por algún tipo de amiguismo.
Pedimos que sean coherentes pues, de todos es sabido, que existe una gran cantidad de población que se encuentra en precarias condiciones sanitarias y hay muchísimas dramas familiares que no se ven o no se quieren ver.
Creemos que, después de toda una larga vida de trabajo y sufrimiento, lo más normal es que se nos ofrezca un retiro digno y con una asistencia en igualdad de condiciones y derechos para todos y no sólo para unos pocos.