Exponer la realidad nos hace plantearnos preguntas. Las papas que se cultivan en La Palma nada tienen que envidiar a ninguna otra, ni siquiera la gallega. Sin embargo, importamos papas. Desde hace 35 años contamos con uno de los observatorios más importantes del mundo, sin embargo, ni siquiera contamos con un Centro de Visitantes (no digo ya un telescopio de uso turístico. Chile tiene 7 y de ellos 4 financiados con dinero público). Tiempo atrás, La Palma era la isla con mayor renta per cápita gracias a la Fuente Santa. Hace ya seis años que fue redescrubrierta, sus aguas analizadas y calificadas como "las mejores aguas termales de toda Europa". Sin embargo, no se ha levantado ni una sola piedra para hacer un balneario de calidad considerable. Todas las fuerzas políticas acordaron construir en la isla un albergue para animales abandonados, repito, todas las fuerzas políticas. Sin embargo, más de un año después, tampoco se ha levantado ni una sola piedra. Ahora tenemos la oportunidad de dar cobijo al telescopio más grande del mundo, con todo lo que eso puede significar para la economía de la isla. Esto es agricultura, turismo, salud, ciencia y desarrollo tecnológico. Y todo ello sin salir de La Palma. Pero, si nada de esto se ha llevado a cabo, recelo de que el E-ELT se instale en La Palma y sólo me cabe una pregunta. Si tenemos posibilidad de todo esto… ¿a qué estamos jugando?