Da gusto circular por nuestras carreteras!

¿Verdad que da gusto circular por las carreteras de nuestra isla? Todos los días hago muchos kms por esta isla bonita, y la verdad es que me encanta. Los firmes lisos de sus asfaltadas vías te invitan a que ir de Santa Cruz de La Palma a los Llanos por la cumbre sea un placer para quienes nos encanta conducir. Carreteras seguras y protegidas por buenas vallas, todas con catadióptricos en caso de niebla nos ayudan a llegar seguros a nuestros destinos. Nuestros neumáticos y nuestros amortiguadores siguen nuevos como de fábrica porque no sufren desgaste gracias a las buenísimas condiciones de nuestras vías.
Tengo que decir que este verano estuve en una isla de las Baleares y era un infierno circular allí. Carreteras llenas de hoyos tapados con cemento, parcheados, que cuando pasaban dos camiones o caían unas gotas se rompían aún más y parecíamos que dejábamos los amortiguadores allí mismo. En unas vías con miles de vehículos circulando al día, el firme estaba tan mal que teníamos que ir sorteando baches y grietas todo el rato, claro, nos arriesgábamos a invadir el sentido contrario para ver si no rompíamos el coche porque no lo habíamos asegurado a todo riesgo en la agencia de alquiler. Toda una aventura. Incluso nos encontramos con carreteras que, por lo que se veía habían empezado a ensancharlas y arreglarlas pero que ahora estaban paradas, con señales de obras y vías en tierra que parecía un Paris-Dakar pasarlas. Y pensábamos ¿Cómo sobreviven los ciudadanos de esta isla a este estado lamentable de carreteras en total abandono para circular a diario a sus trabajos? Por lo menos nosotros estábamos en aquella isla de vacaciones por un periodo limitado. Yo tenía entendido que todos los cabildos, allí en este caso gobiernos autónomos, tenían unas partidas económicas del Estado para mantenimiento y arreglo de carreteras al año, ¿dónde habían invertido ese dinero? porque allí había muchas vías que hacía muchos pero que muchos años que no se les había puesto una capita de asfalto de los más fina. Incluso observamos que las que estaban en mejor estado las habían vuelto a agujerear para instalar alcantarillado o cables de no se qué y que las habián dejado hechas unos Cristos porque se hundía el asfalto de los arreglos ya que no las había afirmado bien, y por lo tanto teníamos que volver a invadir con un rueda el sentido contrario para salvar las alcantarillas del resto del asfalto, que vá, un autentico desastre. Una carretera que unía el aeropuerto con la capital en un estado vergonzoso. Nosotros como turistas nos llevamos una imagen pésima de esos políticos que tenían en ese estado las carreteras de una isla tan turística y tan bella, con unas playas tan maravillosas. Pero lo de las carreteras clamaba al cielo. Menos mal que en mi isla de La Palma esto no pasa…y el que tenga oídos que oiga.