Conste que abro este foro sin saber muy bien si estoy en el marco apropiado y con la única intención de manifestar (y dar la oportunidad a que otros manifiesten) lo lamentable que ha sido la clausura del curso de la Escuela Insular de Música en S/C de La Palma. Esta tarde se ha clausurado el curso para los niños de 4,5 y 6 años así como para un grupo de alumnos mayores, ya de instrumento(flauta, para ser más exactos).
El acto se ha celebrado en el Teatro Chico y lo allí vivido, al margen de la actuación de los niños, ha sido, en mi opinión lamentable. Un teatro que tiene un aforo que ya sabemos es muy limitado y que lleva meses sin aire acondicionado, estupendo para los días de calor que estamos soportando….(nadie tiene la culpa e esto, por supuesto) ¿cómo es posible que no se solucione este problema?
Por otra parte, alguien me puede decir cuántos edificios tiene el Cabildo en S/C de La Palma que podrían servir para organizar un acto como este. Desde la instalaciones del Museo Insular, hasta la Casa Salazar, (seguro que se me escapa alguno) cualquiera de ellos serviria para celebrar el final de curso. Recuerdo que el año pasado la clausura fue en la Plaza de San Francisco y para los niños de esta edad estuvo muy bien,de acuerdo que la acústica no es la mejor pero creo que no es lo que prima en estas edades.
Lo que sí me gustaría destacar es que la Escuela de Música dispone de grandes profesionales y que está claro que hacen lo que pueden con los medios de los que disponen. Esta tarde hubo momentos en los que parecía que iban a romper a llorar ante tanta desorganización. No cabían los padres, los niños, los abuelos. Improvisaron con subir a los niños y meterlos entre bambalinas para que así los padres se pudieran sentar y ver las actuaciones de sus hijos,apretados en el escueto escenario y empapados en sudor.
Hubo momentos en los que algunos padres protestaron, se alzaron algunas voces en el exterior y cerraron las puertas, luego no dejaban pasar… un caos, sin exagerar
Lo de esta tarde fue totalmente injusto, para los niños, cansados de estar desde las 4 de la tarde allí y para las profesoras, que vieron como gran parte de su trabajo se diluía entre ese sudor.
En mi opinión se podía haber hecho algo mucho más digno, en un lugar más apropiado, que lo hay y con más organización.
La labor de estas profesionales merece otro escenario.