Menos mal que no todo es negativo en este año probablemente aciego que nos espera. Ya los no fumadores, el 70% de la población, no vamos a tener que tragarnos el humo y sus peligros de los demás. Y cuando se trata de una familia como la mía en que, además de no fumadores, tenemos dos asmáticos, pues todavía mejor. Solo falta que la hagamos cumplir, por las buenas o las malas, a los recalcitrantes. No es una amenaza, pero sí una advertencia: el dueño de un local que se haga el despistado ante algún cliente cabezota va a encontrarse que algunos otras clientes no tendremos problema en poner la correspondiente denuncia contra ambos, el infractor y el permisivo.
