La Consejería de Educación obliga a los profesores de Secundaria a sustituir a los compañeros que están de baja, cuando se trate de “sustituciones de corta duración”
No ha definido qué significa “corta duración”: ¿una semana, quince días, veinte días, un mes?
Desde las direcciones de los Centros de Secundaria se lo han preguntado a los inspectores y otros responsables de la Consejería pero no han sabido o no han querido contestar.
Obligan a los Directores de los centros a que en un breve plazo les presenten un plan para realizar esas sustituciones.
Los profesores sustituirán a sus compañeros de baja durante las horas de guardia, de tutoría, de departamento.
Es decir, por resolución, la Consejería convierte las horas complementarias en lectivas, lesionando los derechos laborales del profesorado.
Los padres, en principio, podrían estar contentos porque las clases a sus hijos están garantizadas aunque los profesores estén de baja.
Parece verdad, pero no lo es. ¿Por qué?
Pongamos un ejemplo: en 4º de ESO falta el profesor de matemáticas durante 15 días. Un día los sustituirá el profesor de religión, que está de guardia; al otro, el de historia; y otro día, si hay suerte, un compañero de matemáticas o si no el profesor de inglés.
Esto quiere decir que no tendrán todos los días clases de matemáticas, estarán acompañados por un profesor, pero creo que por razones obvias, no recibirán clases de matemáticas.
Pero tiene su lado positivo, la Consejería se ahorrará los sueldos del profesorado sustituto.
La Consejería se lamenta y culpa siempre al profesorado de los malos resultados que obtiene el alumnado canario cuando participa en pruebas externas, ya sean nacionales o europeas. Pero no escucha lo que venimos diciéndole desde hace años. No hay diálogo de ningún tipo.
Para los que no lo sepan: los dirigentes de la Consejería de Educación son profesores de primaria y secundaria que han dejado el trabajo en el aula y que por afiliación al partido gobernante o amistad con miembros del mismo han llegado a los cargos que ocupan.
El profesorado de Secundaria y Bachillerato, en su mayor parte, está formado por Licenciados universitarios, que han hecho oposiciones, que han hecho muchos cursos de actualización y perfeccionamiento. Son profesionales, como los de otros sectores, que luchan por lo que creen: la buena educación.
Ahora se ven formando parte de esta comedia, jugar a dar clases de materias que no son las suyas y así engañar a los alumnos y a las familias.
No podemos seguir contribuyendo con nuestro silencio a la degradación de la enseñanza pública en Canarias.
Y no pedimos más dinero.
NO, NO HACE FALTA MÁS DINERO.
HACE FALTA UNA BUENA GESTIÓN. Dentro de la Consejería de Educación se podrían eliminar cargos, asesores, ayudantes, edificios e incluso hasta direcciones generales y no pasaría nada, o SÍ, el alumnado seguiría teniendo a su profesorado especialista en clase.
Usted que lee esto paga con sus impuestos esta educación, usted, con su voto, elige a los políticos que dictan estas normas y leyes.
Usted puede hacer que todo esto cambie, lo que se está decidiendo es el futuro de sus hijos.