Porque teniendo en cuenta el lamentable estado en el que se
encuentra la isla de La Palma, según se desprende de los comentarios mayoritarios de los
usuarios de este periódico digital, habrá que buscar una solución de futuro que le asegure
a la isla inversión, puestos de trabajo y centros de toma de decisiones alejados de las
garras de los políticos palmeros.
La candidatura de la isla de La Palma para acoger el Cementerio, o mejor dicho, el Centro
de Deposito de Residuos Radioactivos de España,CDRRE a partir de ahora, le aseguraría a la isla una inversión de 500 millones de euros y la creación de 3.000 puestos de trabajo, directos e
indirectos, lo que acabaría con casi el 50% del paro en la Isla.
Si la ganadería y la agricultura no avanzan en la isla. Si las empresas que deben fomentar este sector no funcionan o solo contratan a amigos y familiares. Si los políticos palmeros no sirven o son todos unos corruptos. Si los empresarios palmeros están inmersos en este círculo de amiguismo y enriquecimiento ilícito. Si los palmeros no quieren que se aumente el número de camas turísticas, ni que se construyan nuevos hoteles, ni campos de golf, ni nuevas carreteras, ni puentes, ni fábricas, ni industrias contaminantes tipo cementeras o
plantas de asfalto. Si no se apuesta por las energías alternativas… ¿Por qué no apostar por la energía del futuro? ¡La energía nuclear!
En la peninsula ya hay varios municipios candidatos, pero seguro que estarían encantados en ceder esta infraestructura de futuro para que se instalara en Canarias, más concretamente en
La Palma. ¿Por qué no?