La localidad de San Pedro, en Breña Alta, es un auténtico campo de minas, puesto que los dueños de los animales, concretamente perros, no les da la gana de recoger sus excrementos. Los orines de las mascotas son algo irremediable, pero es muy fácil llevarse una bolsita y recoger esta mierda. Si caminas por ese pueblo, tienes que esquivar, usualmente, algún recuerdo que habrá dejado Fulanito y su perro Toto. Vamos a intentar poner remedio a esto, que con coleccionar bolsas de la fruta tenemos para ello.