Ruta de arte flamenco para conmemorar el ataque de Drake a la ciudad

El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ha organizado una ruta guiada de carácter histórico-artístico que el próximo sábado recorrerá algunos de los principales hitos y enclaves relacionados con el legado flamenco y su influencia en la capital palmera.

Santa Cruz de La Palma flamenca es una iniciativa con la que la Concejalía de Turismo y Patrimonio Histórico capitalina se une a la conmemoración de los 428 años del frustrado ataque del corsario Francis Drake a Santa Cruz de La Palma y que ofrece un repaso a las huellas de Flandes en la toponimia, arquitectura doméstica, pintura y escultura religiosas y artes suntuarias de la ciudad.

El concejal de Turismo y Patrimonio Histórico, Zacarías Gómez, señala que esta actividad "pretende promocionar y difundir uno de los legados culturales y artísticos más ricos de nuestro Archipiélago, tanto entre quienes nos visitan como entre los propios habitantes de Santa Cruz de La Palma, para quienes muchas veces esta riqueza patrimonial pasa desapercibida". El concejal subraya "el enorme interés que poseen estas piezas, que de hecho hace que muchos turistas se acerquen a nuestra ciudad atraídos por la calidad de estas obras artísticas".

La ruta, que tiene carácter gratuito y está abierta a cualquier persona que desee participar, partirá a las 18:00 horas de la Plaza de España y estará conducida por el técnico de la unidad de Patrimonio del Ayuntamiento, Víctor Hernández Correa. El itinerario previsto contempla visitar los templos de El Salvador (que alberga en su interior importantes ejemplos de esculturas flamencas como el Cristo de los Mulatos y San Luis Rey de Francia), la ermita de San Sebastián, la iglesia de Santo Domingo (que reúne la más importante colección de pintura flamenca de Canarias) y la iglesia de San Francisco (que alberga una destacada embajada de escultura flamenca de La Palma, integrada por la Inmaculada Concepción del retablo mayor, la Santa Ana triple y San Blas Obispo.)

Asimismo se visitarán algunas residencias donde existen piezas significativas, como la Casa Monteverde, perteneciente a los descendientes de Jácome de Monteverde, el flamenco con la hacienda unipersonal más rica de Canarias en la primera mitad del siglo XVI, o la Casa Massieu Monteverde, que conserva el frente de los peldaños de la escalera principal decorado con azulejos de Delft.

La ruta transcurre asimismo por algunos enclaves vinculados a la relación de Flandes y La Palma como las calles Vandewalle, que recibe su nombre de uno de los flamencos más influyentes del siglo XVI, o la plaza de Vandale, que recuerda a los señores de Lilloot y Zuitland, pequeño estado situado a tres leguas de Amberes.