En su última sesión del año, celebrada en Lausanne (Suiza), el Comité Olímpico Internacional ha decidido incorporar a las clases de embarcaciones que competirán en la modalidad de vela a los barquillos de vela latina canaria. De esta manera, serán 8 las modalidades que participarán en los Juegos Olímpicos de París 2024, cumpliéndose una vieja aspiración del deporte autóctono canario que, junto a la pelota vasca (olímpica en 1924, 1968 y 1992) serían los únicos representantes del deporte vernáculo español en el olimpismo.
Además de las características competitivas de los barquillos de vela latina, en las que prima el trabajo en equipo, entre las motivaciones que han llevado al COI a tomar esta decisión se encuentra el hecho de ser un deporte, donde confluyen historia, tradición, artesanía, respeto por el medio ambiente, y belleza estética. También se ha tenido en cuenta que las regatas de vela latina en Canarias se vienen realizando desde antes incluso que se celebrara la primera olimpiada de la era moderna en Atenas en 1896. Se da la circunstancia de que desde esa época (1890) ya se incluían regatas de barquillos en los programas de festejos organizados con motivo de la Bajada de la Virgen de Las Nieves.
El impacto de la noticia no ha cogido desprevenidas a las instituciones que en los últimos meses venían trabajando para favorecer la llegada de los distintos equipos nacionales que realizarán su preparación en el archipiélago. En lo referente a la Isla de La Palma, se plantea la posibilidad de convertir el acuartelamiento El Fuerte en un Centro Deportivo de Alto Rendimiento que podría incluso ser aprovechado por otras disciplinas deportivas al igual que funciona el complejo deportivo La Santa Sport (Lanzarote) utilizado por los deportistas, sobre todo nórdicos, para entrenar en invierno.
Entre los países que ya han elegido La Palma para su preparación olímpica se encuentran Portugal, China y Reino Unido, dándose la circunstancia de que el Club de Vela Latina Benahoare se encuentra modificando uno de sus barquillos para adaptarlo a las necesidades de los ingleses ya que, como es sabido, en Gran Bretaña se circula por la izquierda.
