Dadme la escuela y transformaré el mundo

Germán González recibió ayer por la tarde en el teatro Chico capitalino de manos del subdelegado del Gobierno en Canarias, José Antonio Batista, la encomienda de la Orden de Alfonso X el Sabio, (una medalla), que le fue otorgada el pasado 3 de diciembre de 2008 por el Ministerio de Educación, distinción con la que se reconoce su gran labor de años en la Isla en dos campos tan importantes y tan estrechamente vinculados como la educación y la cultura. Han sido 48 años dedicados a la enseñanza y sus propios compañeros fueron los impulsores de este nombramiento.     

Germán González se mostró agradecido por "tan alta distinción que no es sólo mía, sino de todos los profesores, alumnos, padres, compañeros y personal de administración y servicio de la Inspección de Educación de La Palma y del resto de la Comunidad Autónoma de Canarias que han trabajado conmigo a lo largo de los años en la búsqueda de la mejora de la enseñanza en nuestra Isla".

Asimismo manifestó que esta condecoración le satisfacía por un doble motivo. Primero, por tratarse de una distinción que va asociada al nombre de Alfonso X el Sabio. "No podría contar el reconocimiento de una obra cultural y educativa con valedor más legítimo, si tomamos en cuenta la propia obra de Alfonso X en el terreno de la cultura". "Su gloria está en su obra como historiador serio y riguroso, como autor de los Libros del saber de Astronomía, como poeta en lengua Gallega  de las Cantigas  de Santa María, como excelente traductor de Calila e Dimna y, sobre todo, como autor del código Las siete Partidas, verdadero monumento jurídico en tiempos en que la arbitrariedad de los monarcas y los señores feudales constituían la verdadera ley".

El segundo motivo de alegría por este reconocimiento lo encontró Germán González en la Escuela y Museo de Historia de la Educación.  "Ya han transcurrido veinticinco años de la constitución del Colectivo Rayas y todavía no puedo olvidar la alegría que nos produjo la creación pionera en España del Museo de Historia de la Educación gracias a la labor de los miembros que han constituido dicho colectivo".

Decíamos entonces, recordó, en la Presentación de la Revista monográfica Rayas, un Museo de Historia de la Educación en La Palma, que "en esta revista podrás encontrar la historia de Rayas y de la asociación que la constituye. La historia de un museo singular donde se muestra con sentido pedagógico el ayer de la enseñanza; es decir, el mensaje de un pasado que nos transmiten las generaciones que nos precedieron y que forma parte de nuestras vivencias, de los sistemas de valores de la educación, de la intrahistoria de la enseñanza en La Palma y de la relación de ésta con su sociedad".

Amparándose precisamente en la experiencia de estos veinticinco años, González lanzó un aviso a navegante diciendo que el  Archivo y Museo Histórico de la Educación "debe pasar ahora a una institución oficial, que por razones que no vienen al caso no trataremos en este momento".  A continuación comentó que se sigue en la ignorancia de creer que la educación no es rentable políticamente y "para quien lo crea les diré lo que en el año 2000 manifesté aquí, en este mismo lugar, con motivo de recibir la distinción de Viera y Clavijo de la Consejería de Educación. La frase pertenece al filósofo Leinitz  y dice: "Dadme la escuela y transformaré al mundo". Germán González remató esta frase diciendo "creo  que en mi vida profesional he aportado un pequeño grano de arena a esa transformación".

Por su parte, el subdelegado del Gobierno, José Antonio Batista, felicitó a Germán González por "tan honrosa y merecidísima distinción", añadiendo que "no creo que me equivoque si digo que la encomienda de la Orden de Alfonso X El Sabio que hoy se le impone es también en cierto sentido un reconocimiento por parte del Estado al trabajo esforzado y anónimo de muchos maestros y maestras de la isla de La Palma, que con su labor diaria han contribuido, generación tras generación, a la educación de los palmeros".

"Como muchos de ustedes saben, yo soy docente, profesor de la Universidad de La Laguna. Comparto con Germán, pues, la honrosa profesión de enseñar, que es a la vez aprender, no dejar de aprender. Porque Germán no sólo ha sido maestro, sino también un incansable investigador, un espíritu inquieto, que ve ahora reconocida esa labor con la encomienda de la Orden de Alfonso X El Sabio. Germán contribuyó y sigue contribuyendo, con su interés y con su esfuerzo, a mejorar en diversos aspectos la labor docente en nuestra Isla, y a recuperar y preservar para las generaciones presentes y futuras su historia. Por ello me alegro de que un maestro palmero haya sido merecedor de tan alta distinción".

Batista subrayó que el homenajeado "con su incansable trabajo como maestro, inspector e investigador ha realizado una aportación fundamental a la educación de muchos palmeros y palmeras", añadiendo que su aportación se une a la de otros maestros y maestras, profesores y profesoras que han hecho que los niveles de formación en la isla de La Palma sean elevados. De hecho, recordó que La Palma sin ser una isla estrictamente universitaria, sí que ha tenido y continúa teniendo muchos universitarios. "Yo mismo me enorgullezco de ser uno de ellos", apostilló.

El subdelegado del Gobierno aseguró que el  tesoro de cualquier sociedad son las personas jóvenes y formadas que la sostienen, ayudan a cambiarla y la hacen avanzar, apuntando que "a Germán y a todo el colectivo de maestros y maestras de La Palma les debemos buena parte del inconmensurable tesoro que tiene esta Isla" y advirtiendo de que "lo ideal sería que esa riqueza se invirtiera o reinvirtiera aquí, para el fortalecimiento y el desarrollo de esta querida tierra". No obstante, indicó el subdelegado que "esto les toca a otros. Y hay que hacerlo  porque es una verdadera sangría y un hecho tristísimo esa marcha de nuestros jóvenes fuera de la Isla, pues la mayor parte de las veces se convierte en un viaje sin retorno por falta de oportunidades". Batista finalizó su intervención afirmando que "Germán ha realizado en todos estos años una valiosísima aportación que el Gobierno de España ha reconocido concediéndole el ingreso en la Orden Civil de Alfonso X El Sabio".

Por su parte, antiguos alumnos y compañeros de la enseñanza y de la Inspección de Germán destacaron su  valía profesional demostrada durante 48 años de ejercicio en la docencia  y su gran humanidad. "Ha sido un maestro integral" y "su hoja de servicios es intachable", dijeron a un público que llenó el teatro Chico para acompañar a su compañero y amigo en un día tan especial.