El Museo de Bellas Artes abre una nueva sala expositiva en el marco de su centenario

El Museo de Bellas Artes de Santa Cruz de La Palma abre una nueva sala dedicada, casi en su totalidad, a la pintura. En esta sala se exponen una treintena de obras entre las que pertenecen al fondo del Cabildo Insular que no habían sido expuestas al público hasta ahora y otras  recientemente adquiridas.

El Museo de Bellas Artes, la principal sala de exposiciones de la Isla, cumple en este 2015 su primer centenario de andadura. La apertura de esta segunda sala es el segundo acto conmemorativo de estos cien años, y cabe recordar que el primero tuvo lugar el pasado 30 de abril con la apertura de una exposición dedicada a la artista palmera Carmen Arozena, que puede ser visitada a lo largo del presente año.

"Para el Cabildo de La Palma, es un motivo de orgullo poder abrir una nueva sala del Museo de Bellas Artes y lo es, sobre todo, porque continuamos dando la oportunidad a palmeros y visitantes de disfrutar tanto de obras recién adquiridas como de obras que durante años han estado en los fondos del Cabildo sin ser expuestas. Si a la oferta de esta nueva sala , la número 2, le sumamos la excelente muestra de obras inéditas de Carmen Arozena y el hecho de que nos encontramos en plenas fiestas lustrales de la Bajada de La Virgen, creo que estamos ante la mejor de las ocasiones para visitar este espacio museístico", señala el presidente del Cabildo Anselmo Pestana.

En la nueva sala hay pinturas de artistas como Manuel González Méndez, Bruno Brandt, Cándido Camacho, Pepe Dámaso, Fernando Álamo, Facundo Fierro, Teodoro Ríos, Ubaldo Bordanova o Diego Crossa, entre otros, y cabe destacar también una escultura recientemente adquirida por el Cabildo del palmero Miguel Ángel Martín.

Fundado en 1915 y hoy instalado en el Museo Insular (antiguo convento de San Francisco) dependiente del Cabildo Insular, en Santa Cruz de La Palma, el Museo de Bellas cuenta con una colección (entre pintura, grabado y escultura) de cerca de un millar piezas.

En 1915, el político palmero Pedro Poggio y Álvarez (1863-1929) donó a la Isla la colección fundacional del museo formada dos centenares de obras en pequeño formato de su propiedad. Pedro Poggio fue el primer director general de Bellas Artes cuando se creó esta división administrativa, miembro de número de la Academia de Bellas Artes de San Fernando y, en Madrid, frecuentó los ambientes artísticos, tratando a los principales creadores de la época. De esta manera, la colección fundacional está conformada por obras de reducidas dimensiones destinadas a ser contempladas en el espacio doméstico. Entre las firmas que conforman esta serie se hallan pintores tan relevantes como Carlos de Haes, Joaquín Sorolla, Francisco Domingo Marqués o Casto Plasencia.

Debe subrayarse, además, que en 1915 el centro fue creado con la categoría de Museo Provincial de Bellas Artes, en una fecha que Canarias se encontraba administrada en una sola provincia y en un decreto que no ha sido derogado. De hecho, en el Archipiélago no llegó a erigirse ningún otro museo provincial de bellas artes, tan frecuentes en las capitales peninsulares.

En los últimos años, el Museo de Bellas Artes ha visto incrementado su fondo con diversos ingresos y donaciones como las llevadas a cabo por Pedro Castro López, Manuel Poggio y Sánchez, Roberto Rodríguez Castillo, Jaime Pérez García (1930-2009), descendientes del pintor Gregorio Toledo, Urs Baerlocher, María Consuelo Hernández Álvarez, la empresa Juan Cabrera Martín, Mercedes Arango Jiménez, Facundo Fierro y Miriam Arozena Rotta.