Talio Noda, un investigador en Canarias

Hay semanas que vienen tristes, por un lado las matanzas en Gaza, por otro lado la sospechas de manipulación en los votos de un concurso televisivo. Continuamos observando que las víctimas del Holocausto de ayer son los verdugos de hoy, de ahí que el infierno de Gaza continúe ardiendo por los cuatro costados. Ese país famoso a nivel mundial por su servicio de espionaje, ya seduce a menos cómplices entre los gobiernos de la Unión Europea. Pero sus dirigentes siguen confundiendo a todos los palestinos con los militantes de Hamás.

Las imágenes diarias de la catástrofe humanitaria que provoca la ofensiva militar y el bloqueo de la ayuda internacional están sacudiendo hasta a los países más afines. El tono endurecido ante una situación inaceptable ha cristalizado en Bruselas con un giro hasta hace solo unas semanas impensable en Europa, tradicionalmente muy reacia a tomar represalias. Ahora se ha decidido revisar el acuerdo de asociación UE-Israel. Pero puede que estas medidas se queden solo en gestos teatrales sin repercusión, en realidad se trata de calmar la mala conciencia ante tantas muertes, tanta falta de alimento, tanto abandono y tanta ineficacia de las más altas instituciones internacionales, que siempre miran para otro lado.

Menos mal que, en medio de tanta negrura, encontramos el ejemplo de un investigador que ha dado muchas de sus horas para averiguar cosas sobre su tierra. Se trata de Talio Noda, cronista de Tazacorte, quien será proclamado próximamente Hijo Predilecto de su municipio. Él es profesor, investigador y folclorista, hemos compartido trabajo y tiempo en la isla de Gran Canaria porque fue docente en Teror y en la capital como profesor de música e inglés. Su interés en la etnografía y el folclore se relaciona con su labor docente e investigadora y sus investigaciones se concentran desde los años 70 del siglo pasado. Visita archivos, habla con informantes que son archivos vivientes de las tradiciones, sale al campo a observar, a registrar. Ha sido la suya una labor humilde, silenciosa, pausada. Pero que no ha parado ni un momento. Su proximidad a personas de tanto nivel como el musicólogo Lothar Siemens fue un acicate para sus investigaciones. Además, hay que decir que Talio toca perfectamente el timple e incluso se anima a cantar.

Ha publicado libros de folclore y cultura popular como La Música Tradicional Canaria hoy, La seda, un arte palmero de siglos, Décimas de Severo, Salto del Pastor, Otra aportación a los mártires de Tazacorte, Crónica de la música en La Palma 1863-1936, Pastoreo en la isla de La Palma, Medicina popular, Noticias del Valle 1863-1975, Los instrumentos musicales tradicionales, Música y tradiciones en Tijarafe, Habla popular en la Villa y Puerto de Tazacorte. Ha publicado en revistas especializadas y ha presentado comunicaciones en congresos nacionales e internacionales. Hizo un prólogo en un libro dedicado al estudio de las cabras.  Se trata del libro Capas y Nombres de la Cabra Palmera, de los autores Laura Pérez Rodríguez y Alejandro Escuder Gómez. Esta obra es un trabajo de investigación y recopilación de datos para la identificación y clasificación de la cabra local: por la coloración de su capa, la distribución del su pigmento, así como por sus características complementarias, el tipo de cornamenta, las marcas extrínsecas, la productividad, etcétera. Un diálogo con los pastores, que se remontan a los ancestros.

También ha cultivado el folclore, publicando discos e interviniendo en el programa Tenderete. Hijo Adoptivo de Teror y Embajador de Buena Voluntad de la Reserva Mundial de la Biosfera de La Palma, atesora el mejor y mayor estudio de campo de la música y costumbres tradicionales. Sobre todo de su isla natal, pues a principio de los años 70, con un pequeño magnetófono, comenzó a recoger sonidos y testimonios de nuestros mayores que todavía conserva. Recorrió los caseríos y rescató valiosos testimonios, que fue dando a conocer a través de publicaciones. En resumen: un trabajador ejemplar que merece los honores.