La Transvulcania Naviera Armas es espectáculo, emoción y seguridad. La competición de la Isla Bonita contará en esta edición, la décima de su historia, con un equipamiento de atención sanitaria que servirá para garantizar la salud de los participantes y aficionados, lo que convertirá de nuevo a la carrera palmera en una de las que contará con más kilómetros cardioprotegidos del mundo.
Todo esto será posible gracias al acuerdo alcanzado por el Cabildo Insular d La Palma, el Servicio Canario de Salud y la empresa Atlantic Emergency, que permitirá a la organización de la prueba reforzar las medidas de seguridad previstas para la edición más multitudinaria, la del décimo aniversario de la prueba, donde además de los 3.600 deportistas que participarán en las cuatro modalidades (Ultramaratón, Maratón, Media Maratón y Kilómetro Vertical) habrá miles de aficionados siguiendo la carrera.
“Nuestra prioridad es la de garantizar al máximo posible la salud de nuestros participantes y con ello la tranquilidad suya, de sus amigos y familiares y de todos los que forman parte de Transvulcania”, aseguraba la consejera de Deportes del Cabildo Insular de La Palma, Ascensión Rodríguez, que admitía que “con este acuerdo volvemos a estar al frente de la lucha por conseguir una prueba más segura para todos los que formen parte de ella”.
Mientras, la consejera insular de Emergencias y Participación Ciudadana, Carmen Brito, confesaba estar “muy satisfecha por poder contar para la décima edición de Transvulcania con un equipamiento y unos recursos humanos que darán cobertura a cualquier contratiempo y ofrecerán una garantía en lo que a la salud de los participantes se refiere”.
Kevin García, gerente de Atlantic Emergency, explicaba que esta décima edición de la Transvulcania Naviera Armas “tendrá una cobertura de cardioprotección de máximo nivel que estará bien complementada por todo el personal y material sanitario y el material que necesita una carrera de este nivel”.
El equipamiento con el que contará la Transvulcania Naviera Armas 2018 ofrecerá la garantía del cumplimiento de los estándares internacionales necesarios para grandes competiciones de montaña, además de ser una herramienta clave que posibilite revertir cualquier circunstancia o contratiempo como síncopes, desvanecimientos, insconsciencias o crisis cardiológicas.
