UGT y CCOO exigen que no se trate la salud de los trabajadores como una mercancía

Los sindicatos UGT y CCOO celebrarán este lunes de forma conjunta el Día Internacional de la Salud y Seguridad en el Trabajo exigiendo que no se trate la salud de los trabajadores como una mercancía y que no se utilice la crisis como una tapadera para imponer la ideología liberal conservadora que "solo beneficia a los especuladores internacionales y a la banca mundial, verdaderos culpables de la crisis".

En este sentido, solicitan la retirada de los elementos lesivos para los trabajadores en el proyecto de reforma de las mutuas, una mejora normativa de enfermedades profesionales que facilite los procesos de reconocimiento y actualice su listado y la aprobación de la estrategia española de seguridad y salud en el trabajo para el periodo 2013-2020 y el mantenimiento de la inversión pública.

Los sindicatos piden además el impulso del órgano competente en materia de prevención de riesgos laborales en el ámbito competencial de la Administración Laboral Canaria, Instituto Canario de Seguridad Laboral, cuya función de promocionar la prevención y el asesoramiento técnico, tanto a las empresas como a los trabajadores, es fundamental.

Los sindicatos se quejan de que ha sido recurrente por parte de los gobiernos conservadores y de la patronal, el intento de dotar a las entidades colaboradoras o mutuas de la competencia para la expedición de altas médicas por contingencias comunes. Según indican, el trámite diseñado es un paso más hacia la privatización de la sanidad pública. "Las mutuas son asociaciones de empresarios y por tanto una parte interesada en controlar el estado de salud de las personas asalariadas, con la espada de damocles del despedido procedente por periodos reiterados de inasistencia al trabajo inferiores a los 21 días aún justificados debidamente. De ahí el peligro de que las mutas controlen los tiempos de baja", indican.