Consideran esencial fomentar la producción y consumo local y de cercanía, para lo que “es necesario sin más dilación el cultivo de terrenos abandonados y planes de formación para la inserción laboral en el sector”
Alicia Vanoostend, consejera de Agricultura.
La crisis desatada por la enfermedad Covid-19 ha puesto de relieve la importancia de la producción primaria regional para el mantenimiento de la seguridad alimentaria de la población canaria. Este sector se postula de vital importancia para 112 organizaciones, 64 pequeñas empresas y personas autónomas y 1.200 personas a título individual que respaldan la carta enviada a la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca, Alicia Vanoostende, en la que consideran que las medidas tomadas por la Administración hasta ahora son insuficientes y solicitan que se apoye al sector primario.
Dichas organizaciones (entre las que se encuentran Ben Magec-Ecologistas en Acción, la Asociación de ganaderos de Tenerife-AGATE, la Cooperativa de pescadores de San Cristóbal, Greenpeace, Cofradías de pescadores, Intersindical Canarias, entre otras muchas firmantes) reivindican la necesidad de mejorar la seguridad alimentaria del archipiélago a la vez que se posiciona el sector primario como alternativa en la creación de empleo y como fuente de ingresos a miles de familias. En la carta se recuerda que el informe del Consejo Económico y Social (CES) de Canarias de 2019 cuantifica en un ínfimo 1,23% la contribución del sector primario al nuestro PIB; un hecho que parece insostenible en opinión de las organizaciones, empresas y personas firmantes de la carta.
La caída del sector turístico, principal actividad económica de las islas, en el marco de la crisis sanitaria actual, ha dejado gran cantidad de personas desempleadas. En este contexto, y coincidiendo hoy con el día internacional de la Tierra, las organizaciones, pymes, trabajadores/as autónomos y demás personas firmantes solicitan el refuerzo y mejora de las iniciativas de apoyo al sector primario puestas en marcha ya por la Administración; el refuerzo y fomento de entidades y empresas de economía social y solidaria en el sector; y la regulación de precios para hacer posible la diversificación de la producción y reducir las importaciones. Lo más importante, según se desprende de la carta enviada a la consejera Alicia Vanoostende, es recibir del Gobierno de Canarias apoyo para el fomento de la producción y consumo local y de cercanía, para lo que es necesario sin más dilación el cultivo de terrenos abandonados y planes de formación para la inserción laboral en el sector.
En lo relativo al fomento de iniciativas ya existentes se destaca el Programa de Ecocomedores, el cual se considera que debe ser extensible a todos los centros educativos públicos, hospitales, residencias de mayores y residencias de personas con diversidad funcional. También se considera una iniciativa a reforzar, y dar continuidad una vez haya pasado el estado de confinamiento actual, la entrega de cestas de alimentos locales, frescos y saludables a las personas en situación de exclusión. Igualmente, se identifican como otras políticas a incentivar por parte de la Administración, la creación y refuerzo de sinergias con el sector de la restauración a través de contratos directos de abastecimiento de productos locales y el apoyo a la producción local a través de políticas responsables de compra pública.
El siguiente grupo de solicitudes inciden en la necesidad de crear empleos de calidad en el sector primario, diversificando la economía y haciéndola -según afirman las organizaciones firmantes- más sólida ante imprevistos coyunturales y crisis en el sector turístico como ha sido provocada en este caso por la enfermedad Covid-19. En esta línea las organizaciones firmantes consideran fundamental apostar por la formación de personas desempleadas en materia agroecológica e impulsar el cultivo de fincas que se encuentran abandonadas. Para poner en funcionamiento dichos terrenos hoy en desuso, se solicita a la Consejería su actuación, ya sea para la creación de herramientas eficaces para su puesta a disposición y gestión eficiente en el caso de terrenos públicos, como para la creación de incentivos destinados a particulares para que alquilen o cedan sus fincas para el cultivo. Otros de los elementos que se destacan son la necesaria política de protección del suelo rústico para que aquellos de valor agrícola se destinen a su cultivo y la necesaria apuesta por la gestión de la materia orgánica para compostaje.
Asimismo, se puntualiza que esta carta busca fomentar el cultivo también en áreas urbanas, ya que debido al nivel de urbanización de muchos lugares de las islas no puede obviarse la necesidad de cultivar solares de muchos barrios. En definitiva, la agricultura de policultivos, la ganadería extensiva, la pesca artesanal sostenible y la producción derivada de estas actividades, debe ser una alternativa en la creación de un sustento de vida en las islas. No obstante, para ello, las organizaciones firmantes recuerdan que es necesario la dignificación del sector. No únicamente poniendo en valor dicho sector en materia alimentaria y de salud, sino también dignificando el trabajo, pues “es conocido que muchas personas rechazan dedicarse al sector primario debido a las precarias condiciones laborales y bajos salarios con lo que éste cuenta”. Trabajar la tierra, en este sentido, debería ser una alternativa viable y deseable de empleo para personas jóvenes y desempleadas, indican.
La regulación del precio del agua y del suelo, el más caro con diferencia respecto a la península, es otra de las cuestiones que ponen en evidencia las organizaciones firmantes, las cuales recuerdan que el mercado del agua es una asignatura histórica pendiente para todos los Gobiernos de Canarias. También se hace hincapié en la necesidad de articular medidas de calado (políticas de precios para evitar dumping, reducción de subvenciones a productos importados, etc.) para poder reducir las importaciones de alimentos que supongan competencia a la producción local.
Todas las organizaciones, pymes, autónomos/as y personas que firman esta carta en apoyo del sector primario de las islas piden a la consejera que considere con rigor y seriedad las propuestas que se le han hecho llegar. Dichas organizaciones y demás firmantes entienden, tal y como lo expresan en la misiva, que estas medidas “ayudarán no sólo a mantener el poco sector primario que tenemos en las islas durante esta crisis sanitaria, sino a poder posicionarlo en el futuro donde se merece y del que se pueda vivir dignamente con unas políticas adecuadas”.
Para estas organizaciones el sector primario debe posicionarse en Canarias como una alternativa viable y deseable de vida. Y ello porque, según afirman, además de poder generar miles de empleos en el archipiélago y ser, por tanto, una fuente de ingresos para muchísimas familias de las islas, es bueno para la salud de las personas, para el medioambiente y para la lucha contra los efectos del cambio climático.
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