En el Ministerio, en París.
Las negociaciones para la concreción del Marco Financiero de la Unión Europea continúan avanzando con el objetivo de cerrar la distribución de los fondos agrícolas entre los estados miembros y las regiones de la Unión Europea. Entre estas últimas, las Regiones Ultraperiféricas de la UE, que conforman las islas de ultramar de Francia (Guadalupe y Martinica), España (Canarias), y Portugal (Azores y Madeira), representan apenas un 0,01% del presupuesto global de la PAC, pero el futuro de su sector primario depende de que los fondos destinados al Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias POSEI no se vean en ningún caso reducidos en el próximo septenio.
El sector platanero de Canarias, Martinica, Guadalupe, y Madeira, representa el principal sector exportador de la agricultura de estas islas, y su volumen social, así como su carácter estratégico, generan en sus regiones una enorme incertidumbre ante una potencial reducción de los fondos POSEI.
En este sentido, el pasado 1 de septiembre, en la reunión informal del Consejo de Ministros de Agricultura de la UE, el ministro de agricultura español, Luis Planas, se manifestaba claramente a favor del mantenimiento específico del POSEI “para proteger la singularidad del sistema productivo de las islas, como el de Canarias, que, por su lejanía, cuentan con este programa específico”.
Esta misma posición debe ser defendida a ultranza por los tres países afectados, pero es además necesario ampliar apoyos. Con este fin, el Gobierno francés y los representantes del sector platanero europeo (APEB), han intercambiado diferentes opciones de actuación.
Actualmente la posición de la presidencia alemana en la negociación del presupuesto definitivo de la UE es determinante, por lo que éste es el primer apoyo a reforzar. Con este objetivo, una de las opciones abordadas en la reunión es la puesta en marcha de una acción conjunta de Francia, España y Portugal dirigida a reforzar el apoyo de Alemania con el mantenimiento del POSEI. Este apoyo es clave no sólo ante las reuniones que próximamente mantendrán los ministros de agricultura de la UE, prevista inicialmente para el próximo 21 de septiembre, sino igualmente dado el marco de negociaciones que Alemania está llevando a cabo con la Comisión Europea y el Parlamento Europeo después de la negativa de éste último a la propuesta de presupuestos marcada por el Consejo.
A juicio de Domingo Martín Ortega, presidente de la Asociación de Organizaciones de Productores de Plátano de Canarias, (Asprocan), “nuestro trabajo es recordar que esta otra parte de la Europa no continental tiene unas circunstancias específicas que, como tal, debe ser defendida, no sólo por nuestros estados directamente afectados, sino por toda la UE. Hoy esperamos haber dado un nuevo paso para que nuestras necesidades puedan verse atendidas en un marco de negociación complejo pero que no por ello debe ser ajeno a nuestra realidad. En el mantenimiento del POSEI nos jugamos el futuro del sector agrícola de las Regiones Ultraperiféricas”.
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Yo dejé de comprar plátanos. Ahora los venden en las tiendas medio verdosos y desde que se maduran un poco se quedan blandos, molidos, podridos. Por dentro tienen una hebra negra que da reparo comer. Están todos llenos de manchas por fuera y por dentro. Dicen que las manchas en la piel son el indicativo de que son plátanos canarios, pero para mí es la prueba de estar en mal estado. A mí me da igual de dónde vengan, si de Canarias o del Caribe, lo que quiero es que sean de buena calidad y estén a muy buen precio.
No sé qué pasa con los plátanos, si es que se estropean al conservarlos en cámaras, si cuando cortan las piñas los maltratan y los dejan expuestos a los rayos solares, si los agricultores le echan productos químicos, si en el proceso de empaquetado les dan maltrato, si en el transporte les dan golpes y estás expuestos al calor, si la gente en los supermercados los aprieta para ver si están buenos y luego se pudren… el caso es que hace tiempo que ya no compro plátanos. Para llevar plátanos a casa y luego tirarlos a la basura mejor los dejo en las tiendas. Ahora, en lugar de plátanos, compro kiwis de Nueva Zelanda.
Luego está el precio de los plátanos, casi dos euros el kilo, más de lo que ganaba mi abuelo al mes cuando empezó a trabajar en un almacén de plátanos. ¿Cómo es posible que estando la isla de La Palma rodeada de plataneras sean tan caros los plátanos aquí? En la península están más baratos. Plátanos a 1 € el kilo todavía me parecen muy caros, pero claro, los ponen a casi 2 €, los turistas los compran sin rechistar y mañana te los espichan a 3 €. Luego mucha gente aplaudiendo el tinglado turístico con las orejas, gente que malvive explotada en el sector servicios por un sueldo mileurista con contratos de trabajo precarios. Cuando alguien con un sueldo mileurista no pueda llegar a fin de mes porque la alimentación está cada vez más cara… que vaya pensando en emigrar al continente africano en una patera, ah, bueno, que aquí en La Palma hay mucha gente que ni siquiera cobra mil euros mensuales y alguna está en el paro.
Una solución sería comprarle los plátanos directamente al agricultor, pero sigue el problema de que ahora los plátanos se estropean de un día para otro, los compras hoy y mañana están podridos.
Hoy fui a comprar kiwis y me quedé sorprendido al ver unas bolsas pequeñas, redes, con tunos, 6 tunos pequeños medio podridos y mal barridos, llenos de picos, 1,50 €, un disparate. Así son las cosas cuando el lugar donde vives lo quieren enfocar al turismo… que la inflación se dispara y la cesta de la compra es cada día más cara. Yo no doy un céntimo por esos tunos, pero los turistas, sobre todo los alemanes, sí. Bueno, como la isla de La Palma se está quedando sin tuneras tal vez por eso ahora son tan caros, junto con los turistas llegan los patógenos y las plagas, llega la cochinilla mexicana.
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