La consejera de Coalición Canaria, Carmen Brito, denuncia que la falta de gestión en el Cabildo ha dejado sin ayudas a las asociaciones de vecinos de la isla poniéndolas en una situación económica crítica.
“Estamos en marzo y no se han abonado las ayudas de 2020 y tampoco se han publicado las bases para las ayudas de 2021, a pesar de que están aprobadas desde enero. Esto solo se puede explicar por la falta de gestión y de interés de la consejera de Participación Ciudadana, Nieves Rosa Arroyo, para estar detrás de los asuntos de su área y que salgan adelante”, afirma. “No sabemos -agrega- si ha sido por despiste, por dejadez o si se trata de una decisión política de dejar a las asociaciones de vecinos sin ayudas”.
Se trata de una subvención de 80.000 euros destinada a todas las asociaciones de vecinos para que puedan llevar a cabo sus actividades, cubrir sus gastos corrientes y realizar inversiones para mejoras en sus locales.
“Nos consta que varias asociaciones se han puesto en contacto con el Cabildo para manifestarles su preocupación porque dependen de la ayuda anual para poder llevar a cabo sus actividades, cubrir sus gastos corrientes y realizar inversiones para mejoras en sus locales”, relata la consejera de CC.
En la pasada legislatura, cuando CC gestionaba el área de Participación Ciudadana con Carmen Brito al frente, las ayudas a las asociaciones de vecinos se duplicaron y pasaron de 40.000 a 80.000 euros y se agilizó el pago de las mismas. “Ahora, lamentablemente, después de todo lo que costó avanzar, se están dando pasos atrás y, si siguen con la mala gestión actual, las ayudas van a acabar por perderse”, advierte Brito.
“No olvidemos que la actividad de las asociaciones de vecinos se ha visto muy afectada por las restricciones del Covid y tienen que asumir el coste de las medidas de seguridad sanitaria para poder seguir desempeñando su importante papel en la dinamización de los barrios y como promotores de actividades de ocio para personas mayores”, recalca la consejera nacionalista.
El Cabildo, dice, no debe restar valor e importancia a la labor social que hacen las asociaciones de vecinos en los barrios de la isla. En este sentido indica que “son el núcleo duro de la participación ciudadana y es una incongruencia dejarlas de lado al mismo tiempo que se habla de activar la figura de los consejos de barrio”.
