Pitapalma afronta la nueva temporada con el problema del transporte de frutas tropicales y otros productos a la Península

Tras un año 2020 complicado por el coronavirus, con una producción casi imposible de llevar al mercado, la Asociación de Productores de Pitaya de La Palma, Pitapalma, está a punto de arrancar la nueva temporada.

Con una producción de más de 10 toneladas en la campaña pasada, esperan superar ampliamente dicha marca en la que va a ser el tercer año de la asociación Pitapalma.

De un grupo inicial de 8 personas han pasado a 26 asociados, y de una producción casi simbólica, hoy en día se sitúan en casi una veintena de toneladas.

Desde la asociación apuntan el gran problema que tiene cualquier producto producido en La Palma para llegar a los mercados peninsulares.

“En la campaña pasada, la empresa Europlátano nos ha ayudado en la tediosa y complicada tarea del envío de la fruta hasta Cádiz, y gracias a ellos pudimos sacar adelante nuestra producción. No sabemos como agradecer a Europlátano el apoyo que nos ha dado en todo momento” comenta el presidente de Pitapalma, Vicente Ayud.

Pitayas, maracuyás, carambolas, mangos, aguacates, guanábanas, café, flor cortada, etc, al tener producciones pequeñas es “impensable organizar una partida de envío ya que en barco serían contenedores completos para que salga rentable, y en avión los costos se van a casi los 2 euros/kg”, explican desde la Asociación.

El mercado canario no absorbe la producción de La Palma en tropicales con lo que obligatoriamente hay que dirigirse fuera. Con ello, explican, tropezamos con el problema del transporte que es un gran hándicap a resolver.

Desde la asociación Pitapalma señalan que en los últimos meses se han reunido en tres ocasiones con el consejero del sector primario del Cabildo, José Adrián Hernández, para intentar resolver dicho problema. La idea propuesta por esta asociación es que el Cabildo, a través de Sodepal, ponga un contenedor mensual de 20 pies para llenarlo con productos palmeros, no solo frutas y hortalizas, sino incluso productos elaborados (mojos, mieles, etc). La frecuencia de dichos contenedores sería 1 vez al mes y poco a poco se irían aumentando según la demanda, siempre bajo la tutela del Cabildo a través de la empresa pública.

Además del problema del transporte, el presidente de Pitapalma apunta que los productos tropicales palmeros están expuestos a “doble todo”, es decir, doble certificado fitosanitario, doble inspección aduanera, etc, con lo que implica doble costo añadido. “Cómo vamos a competir con los productos peninsulares en dichas condiciones”, se pregunta. Para salir de la isla, las partidas de frutas van con su correspondiente certificado fitosanitario e inspección. Al llegar a península vuelven a emitir dicho certificado, inspección, etc.

Para intentar solucionar estas situación, a través del consejero de Agricultura del Cabildo de La Palma, se solicitó una reunión con la consejera de Agricultura del Gobierno de Canarias.

La Asociación Pitapalma hace un llamamiento a todos los grupos y asociaciones de productores de tropicales y otros productos en La Palma, para luchar conjuntamente por una solución al transporte y al doble trámite que antes apuntaban. “En las condiciones actuales -indican- de poco nos vale tener productos ecológicos, canarios o palmeros para competir con productores peninsulares”.

El email de contacto de Pitapalma es: asociacion.pitayas.lapalma@gmail.com