"Relacionar el aumento de la superficie de viña con la construcción de villas turísticas carece de sentido"

“Relacionar el aumento de la superficie de viña con la construcción de villas turísticas carece de sentido”, así lo asegura la Mesa de la Mujer Rural (MMR). Esta Asociación considera que a raíz del estudio diagnóstico sobre la viticultura en Canarias, presentado el 21 de abril por la Dirección General de Agricultura del Gobierno de Canarias, algunas voces han pretendido relacionar “erróneamente” el aumento de la superficie de viñedo en la comarca noroeste con la proliferación de establecimientos turísticos alojativos de nueva planta en suelo rústico, amparados por la denominada Ley de las Islas Verdes.

El informe de la Dirección General de Agricultura se centra, según indica, en la evolución de la superficie de viña entre los años 2009 y 2017, reflejando a nivel insular un aumento de esta en la comarca noroeste, concretamente en la franja altitudinal entre los 1.100 y los 1.400 m.s.n.m.

A este respecto indica que el aumento de la superficie dedicada a este cultivo en los municipios de Tijarafe, Puntagorda y Garafía se debe, entre otros factores, a: la mayor aptitud de la zona desde el punto de vista edafoclimatimático, puesto que es en el área por encima del mar de nubes donde menores problemas fitosanitarios se generan, según apunta el informe; la mejora de los accesos; las variedades presentes en la zona y su progresivo aumento de precio, por su calidad para vinificación en estas orientaciones y altitudes; la existencia de algunos depósitos elevados, para el sistema contra incendios en el monte, que permiten disponer de un cierto volumen para riego, en algunas explotaciones; la creación, a partir del año 1998, de la denominación de origen de La Palma y la consiguiente puesta en valor del producto; que, hasta la fecha, no existía competencia en la zona con el desarrollo urbanístico ni con otros cultivos como el del aguacate.

Asimismo añade que no es hasta marzo de 2019, según datos publicados en la sede electrónica del Cabildo, cuando finaliza el procedimiento ambiental de los dos primeros proyectos de establecimientos turísticos alojativos en suelo rústico de protección agraria. Por tanto, dice, las primeras licencias concedidas no pueden ser anteriores a esta fecha.

La Asociación entiende por ello que “habrá que esperar, para poder analizar esta supuesta relación, a próximos estudios que aborden la situación desde el año 2019 en adelante”, aunque según fuentes consultadas, apunta, ya se está produciendo un aumento en el precio del agua y del suelo sobre el que los agricultores difícilmente podrán competir”.