Un equipo de la Oficina de Atención a la Ciudadanía informará in situ a las personas que se alojan en el hotel de Fuencaliente sobre los trámites y las ayudas

El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha celebrado este martes una reunión de coordinación de la Oficina de Atención a la Ciudadanía afectada por la emergencia volcánica de La Palma. En ella, el jefe del Ejecutivo y el viceconsejero de la Presidencia, Antonio Olivera, hicieron un balance de los primeros días de actividad de dicha oficina ubicada en la Casa Massieu, en Los Llanos de Aridane.

El presidente de Canarias aseguró que durante el fin de semana se atendió a una veintena de personas que principalmente acudieron a la oficina a solicitar información sobre el estado de sus viviendas, sobre las ayudas directas básicas y la atención psicosocial. El presidente manifestó que, durante el día de ayer y el de hoy, el volumen de atenciones se ha incrementado. Torres ha informado de que al personal que está operativo en la oficina estos días se unirán, en las próximas fechas, los catorce trabajadores sociales y otros técnicos que formarán parte del equipo estable. Torres también adelantó que próximamente parte del personal se trasladará al hotel de Fuencaliente donde se alojan 200 personas afectadas por la erupción, “a las que se facilitará información in situ sobre su situación y los trámites que deben realizar”.

Ángel Víctor Torres, tras la reunión que se llevó a cabo de forma telemática, también hizo referencia al suministro de agua de riego para las zonas que han quedado aisladas y afectadas por la rotura de una tubería principal. En ese sentido, el presidente recordó que hoy mismo llegan las dos desaladoras adquiridas “para tenerlas instaladas y en funcionamiento a la mayor brevedad” y destacó que se han activado otros mecanismos para asegurar el abastecimiento, como la llegada de los barcos cisterna o el uso de helicópteros Kamov, capaces de trasladar agua de embalses.

El presidente insistió en que “estamos trabajando a destajo para resolver el suministro de agua con todos los mecanismos que están a nuestro alcance y que nos permitan actuar de la manera más rápida posible”. Torres aseguró que las medidas tomadas permitirán mucha más rapidez en la resolución del problema que otras opciones, como la construcción de una tubería que atravesara la costa, con las que “tardaríamos meses en dar respuesta”, apuntó.

Con respecto a las soluciones habitacionales, Torres confirmó que el jueves se va a convocar un Consejo de Administración de Visocan para la adquisición de cerca de una veintena de viviendas en La Palma.

El presidente de Canarias también participó, este martes, de forma telemática en el Comité Científico de hoy celebrado en el Cabildo de La Palma, para hacer seguimiento a las novedades. El jefe del Ejecutivo insiste en que “no sabemos en qué momento de la erupción estamos y seguimos sin saber cuando va a acabar” e informó de que, tras la rotura del cono principal y la salida más abundante de lava, los científicos han trasladado que la colada transcurre por un tubo volcánico hacia el mar, “y eso es positivo, según nos comentan, siempre y cuando no aparezcan nuevos puntos de emisión”, aclara el presidente. “Lo importante es que esto acabe como empezó, sin daños personales. La reacción de la ciudadanía palmera ha sido ejemplar. Sigamos respetando las recomendaciones de los científicos y los cuerpos de seguridad”.

Paquete de medidas aprobadas en el Consejo de Ministros

 El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha valorado hoy la importancia que tiene el paquete de ayudas extraordinarias que ha sido aprobado en el Consejo de Ministros, porque contempla “medidas muy necesarias que han llegado muy rápidamente, con un total de 213 millones de euros”, apuntó Torres.

El jefe del Ejecutivo destacó que entre las medidas más importantes se encuentra un Plan de Empleo específico para La Palma, con 63 millones de euros, “que es imprescindible porque hay familias que han perdido su sustento económico”, apuntó.

También destacó la ayuda de 30.000 euros para aquellos que hayan perdido su casa y que, por cierto, “dobla la cantidad establecida hasta el momento para los damnificados por catástrofes naturales, que era de 15.000 euros”. Torres explicó que esas ayudas “son complementarias y compatibles con la entrega de viviendas para aquellos que la han perdido y con las ayudas para la compra de enseres”.