El volcán no ha parado su actividad y la lava sigue avanzando y amenaza el centro del barrio de Laguna, en Los Llanos, que está evacuado desde hace días. En estos momentos hay dos coladas que preocupan, una que se dirigía al colegio pero que, según informa la consejera de Seguridad y Emergencia, Nieves Rosa Hernández, está parada por el momento, y no ha llegado al colegio ni al parque de bomberos, y una segunda lengua que se encuentra en la gasolinera, que se se vació totalmente por la proximidad de las coladas, su avance es lento. La preocupación y la vigilancia es máxima porque el riesgo de que se puedan adentrar en el corazón del barrio es real. En su avance, las coladas han arrasado todo lo que han encontrado a su paso agrandando aún más la devastación y el dolor.
Transcurrido un mes del inicio de la erupción volcánica, continúa el proceso de emisión de magma siguiendo un patrón similar al de días previos. Desde la Dirección del Pevolca se sigue especialmente la evolución de las coladas más septentrionales. La más cercana al mar, que discurre al sur de la Montaña de La Laguna, se encuentra a menos de cien metros de la costa. Cuando llegue a esta zona, se procederá al confinamiento de los núcleos de San Borondón, La Condesa, Marina Alta, Marina Baja y el núcleo de Tazacorte, en previsión de la emisión de gases que produzca el contacto de la lava con el mar.
En cuanto a la calidad del aire, la capa de inversión térmica seguirá en cotas bajas hasta el próximo día 22, lo que impide la dispersión de gases y partículas en suspensión y afecta especialmente a El Paso. Se mantiene la recomendación del auto confinamiento de los vecinos y el uso de mascarillas FFP2 o superiores en caso de tener que salir a la calle.
La superficie afectada por el proceso eruptivo alcanza 779,89 ha y la anchura máxima entre los puntos extremos de las coladas se mantiene en unos 2.900 metros, aunque con zonas no dañadas.
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