La Palma impulsa la economía azul en el foro de PLOCAN

Joaquín Hernández, director de PLOCAN y coordinador del proyecto DELTA (mediante el que se financia este evento), destacó la necesidad de aprovechar el potencial económico de La Palma mediante tecnologías avanzadas. Según Hernández, “durante años se ha desaprovechado el enorme potencial del sector de la economía azul, la producción agrícola y las energías renovables. La clave está en incorporar tecnologías que hagan estos procesos más rentables y sostenibles”.

El acto inaugural también contó con la intervención de Antonio Acosta, director general de Costas y Gestión del Espacio Marítimo Canario, quien señaló que “tenemos que mirar al mar como miramos a las estrellas en La Palma. Ambos son recursos extraordinarios que pueden potenciar el desarrollo de la isla, si los utilizamos de manera sostenible y estratégica”.

Sergio Rodríguez, presidente del Cabildo de La Palma, hizo un llamado a abandonar la visión tradicional de la economía insular para aprovechar el potencial del mar: “Llevamos muchos años viviendo de espaldas al mar y es hora de mirarlo de frente, de explorar las oportunidades que ofrece para desarrollar nuevas fuentes de empleo y riqueza para la isla”. Rodríguez subrayó el compromiso del Cabildo en promover la formación especializada en economía azul como vía para generar talento cualificado en sectores emergentes y reafirmó la colaboración con PLOCAN para posicionar a La Palma como un referente en economía azul.

Por su parte, Miriam Perestelo, consejera de Promoción Económica del Cabildo de La Palma, puso el foco en las oportunidades económicas y sociales de la economía azul para diversificar la economía insular. Según Perestelo, “los océanos representan una oportunidad única para La Palma, no solo como fuente de alimentos, sino como motor de desarrollo económico, empleo y bienestar social”. También destacó iniciativas como “Blue Experience”, destinadas a sensibilizar a la población e impulsar actividades económicas sostenibles relacionadas con el entorno marino.

En el taller participativo del foro, los asistentes debatieron los retos y oportunidades de la economía azul en tres mesas de trabajo. En la mesa sobre innovación y emprendimiento azul, se destacaron barreras administrativas, como la complejidad para gestionar autorizaciones, y la falta de personal cualificado en perfiles básicos como soldadores o técnicos en acuicultura. Se identificaron oportunidades en sectores emergentes como el ecoturismo vinculado al sector primario, proponiendo la integración de actividades como pesca-turismo o buceo-turismo, y la necesidad de fortalecer la formación profesional para cubrir las demandas del sector.

En la mesa de biodiversidad y conservación marina, se subrayó la importancia de ampliar el conocimiento sobre el medio marino y garantizar su difusión a gestores y ciudadanía para legislar de manera informada. Se debatió sobre problemas como la sobreexplotación de la biodiversidad y la contaminación, proponiendo planes de cogestión participativa y una legislación insular específica para regular el uso sostenible de los recursos marinos, especialmente en pesca.

La mesa sobre retos estructurales y necesidades del sector puso el foco en la necesidad de retener talento local, mejorar infraestructuras como el transporte entre islas y resolver la falta de técnicos especializados. Se plantearon soluciones como la creación de un sandbox regulatorio en La Palma para innovar en normativas adaptadas al sector azul y una ley del suelo singular para abordar problemas específicos como la vivienda. También se enfatizó la importancia de equilibrar innovación y conservación para permitir un desarrollo económico responsable.

Un modelo sostenible y tecnológico

El foro destacó la importancia de la tecnología como motor del desarrollo de la economía azul en La Palma. Joaquín Hernández señaló que “podemos investigar, preservar y al mismo tiempo generar riqueza a través de actividades económicas responsables que aprovechen nuestro entorno marino”. También subrayó el potencial de recursos como la fajana volcánica para diversificar la economía y fortalecer sectores como el ecoturismo. Según Hernández, “La Palma tiene un capital ambiental extraordinario que, de ser explotado de manera sostenible, puede generar empleo, actividad económica y proteger el medio ambiente”.

El VI Foro de Economía Azul concluyó con el compromiso de integrar las conclusiones en un documento estratégico que sirva de guía para dinamizar el sector en La Palma. Este modelo buscará equilibrar sostenibilidad ambiental y desarrollo económico, consolidando a la isla como un referente en economía azul en el archipiélago canario.