CajaCanarias celebra en La Palma los Encuentros empresariales en La Caja, donde participa el economista bagañete José Ángel Rodríguez.
El catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de La Laguna, José Ángel Rodríguez, intervino ayer en los Encuentros Empresariales organizados por CajaCanarias, donde se debatió entre representantes de la patronal palmera "la situación actual y las perspectivas futuras de la economía palmera". El economista bagañete hizo un balance sobre la situación económica insular y, especialmente, sobre su futuro visto desde esta coyuntura de crisis. El encuentro estuvo presidido por David Cova, director general de CajaCanarias; Pilar Ramos, directora del Área Comercial de esta entidad de ahorro en La Palma y Francisco Javier Reyes, director gerente de la Fundación Fyde-CajaCanarias.
Rodríguez explicó en su intervención que "ahora hay vientos huracanados, pero llegarán los alisios. Es una crisis dura, difícil, que abre interrogantes porque no hay experiencias parecidas. Pero La Palma debe tener claro que si no nos preparamos para adaptarnos, reformar, innovar, hacer cosas distintas, el futuro no lo ganaremos tanto". El economista palmero advirtió de que "no podemos estar en actitudes contemplativas esperando que los de fuera nos resuelvan la situación. El futuro será peor si no hay procesos internos de adaptación, de hacer cosas diferentes, dándole más protagonismo a los emprendedores".
Para Rodríguez, el cambio más difícil en La Palma es el de la "mentalidad". "La Palma tiene un grado de calidad de vida, un stock de capital social disponible, sobre todo en infraestructuras, bastante aceptable. Ahora bien eso es una cosas y otra diferente es la dinámica, las iniciativas, las innovaciones y aquí estamos mucho más corto. Tenemos una buena base donde apalancarnos, pero los actores, los protagonistas deben tomar nuevas rutas, emprender con la mentalidad de que no se pueden repetir las rutinas o inercias". En definitiva, considera que "no estamos para repicar campanas pero tampoco para estar de funeral", si bien advirtió de que "debemos de ser realistas porque hay cosas que en La Palma no se van a poder hacer, pero hay potencialidades que no existen y pueden ser y hay cosas que tenemos y que hay que reformarlas".
Los mejor preparados. José ángel Rodríguez puso en tela de juicio afirmaciones recientes realizadas por el presidente del Gobierno de Canarias o del que fuera hasta bien poco presidente del Cabildo palmero en el que se ponía a La Palma como la isla mejor situada para afronatr la crisis. Para el economista, además de ser discursos que responden a "exageraciones" del relato político vienen dadas también por una "confusión". Ya que, según explicó, por un lado está "la sensación de lo que uno se encuentra cuando llega a esta isla y la ve sosegada, estéticamente bonita, da la impresión de que no hay grandes problemas. Pero por debajo sí los hay,como el hecho de que tantos estudiantes palmeros que se van y no vuelven a la isla. Se confunde esa calidad de vida con las dinámicas, las proyecciones. La Palma ahí no es un ejemplo desgraciadamente".
Del mismo modo señaló que "La Palma vive mucho del erario público y poco del sector privado. Esto se puede sostener hasta cierto punto. Que las pensiones sean un capítulo importante de los ingresos de La Palma no está mal pero estaría mucho mejor que nuestra gente mayor tuviera pensiones, que hubiera un tejido empresarial, que tuviéramos productos excelentes reconocidos fuera, que tengamos varios creadores que sean referente. Una isla que es capaz de tener una fiesta tan espectacular como la Bajada de la Virgen, refleja un espíritu creativo en el que debemos inspirarnos. Eso no solo debe servir para encontrarnos cada cinco años, debe ser motivo de inspiración para muchas cosas".
Repaso histórico. Rodríguez realizó un recorrido por la historia de la economía más reciente de La Palma, "una isla que pasó en pocas décadas de tiempos muy duros a una prosperidad, con ciertos toques rentistas, porque más que desarrollar iniciativas, proyectos, se vive un poco de lo que nos dejan. El trabajo en las plataneras se fue haciendo más cómodo, aunque el nivel de renta ha ido bajando. En los años 60 una familia vivía con media hectárea, hoy no menos de dos y media o tres son necesarias para estar relativamente igual que en aquel entonces. Los emigrantes que traían dinero, hacían viviendas, planteaban negocios (bares, taxis), generaron un cierto espíritu rentista, un tanto conformista, de no arriesgarse. Esto explica el crecimiento de Los Llanos de Aridane, que fue el núcleo principal del plátano y de las rentas llegadas de Venezuela. De pronto se empezaron a desarrollar en los ochenta los servicios públicos En La Palma hay más maestros de escuela que gente que trabaja en el plátano. Cuando se dice que el plátano es la el 80% de la economía palmera es un error. Esto no resta para asegurar que el plátano es muy importante, tiene además un valor intangible en el paisaje".
José Ángel Rodríguez reconoció que "hemos estado relativamente bien. La Palma es más armónica que otros sitios que están más deteriorados. Los palmeros tiene mucha renta en especies, vivienda, muchas pensiones y eso da una sensación de que La Palma no está mal económicamente. No está tan mal económicamente, pero una economía necesita iniciativas, proyectos nuevos, diversificar, dar juego".
El economista palmero prosiguió en su relato histórico y llegó a los noventa, cuando "creímos que nos íbamos a enganchar a esa gallina de los huevos de oro que era el turismo. La Palma se ha incorporado al turismo de una manera significativa, pero están destinos como Croacia, Turquía, Túnez. Tenemos que afinar mucho porque tenemos demasiados competidores en todas las estaciones. Cuando el despegue se había producido, la criatura estaba gateando, ha habido este frenazo. Nos hemos quedado algo desconcertado y manejando dilemas. Qué se puede hacer aquí el desarrollo turístico para que sea más y mejor".
En cuanto a si hay pobreza en la Isla, indicó que hay colectivos en esa situación, pero no es subdesarrollo. "Canarias no es subdesarrolo. Me molesta mucho oír este discurso y a quienes lo dicen deberíamos embarcarlos y mandarlos a África. Eso es un insulto a los pobres". Es cierto, según Rodríguez, que "nosotros tenemos pobres, gente con bajos ingresos, familias con el seguro de desempleo, es una situación económica muy difícil. Pero hambre no. No nos podemos permitir ese tipo de comparaciones". Argumentó que "se ha hecho una encuesta sobre las condiciones de vida en los hogares canarios y se detectan dificultades enormes de la familias para llegar a final de mes y Canarias es de las tres o cuatro peores comunidades del Estado, eso hace que el nivel de ahorro sea más bajo, los ingresos también, las mujeres ganan un 20% menos". "En pobreza relativa Canarias tiene esa franja en proporciones mayores de España y La Palma no escapa de eso. Pero en La Palma hay mucha renta en especie: huertita, pensión, hijos que le echan una mano a los padres. Está mejor en esto, pero hay otras islas como Lanzarote y Fuerteventura que ya la superan en términos de producción, población".
Turismo. José Ángel Rodríguez se refirió al sector turístico donde la Isla, desde su punto de vista, "ha planteado una estrategia turística algo diferente y esperemos que se vaya haciendo realidad". "Nosotros no podemos competir vía grandes masas, pero sí podemos hacer otro tipo de productos turísticos más adaptados a las condiciones de La Palma. La Palma tiene que hilar muy fino para no repetir errores y todos lo que tengan proyectos faraónicos en La Palma se han equivocado de lugar". Asimismo, indicó que La Palma cuenta con núcleos turísticos embrionarios (Los Cancajos, Puerto Naos, Tazacorte, Puerto Espíndola y la La Fajana) y apostó porque, "siendo las cosas complejas, debemos ponderar lo simple, lo evidente, lo que existe y esto es lo que hay que poner en preferencia. Vamos a consolidar y bien lo que tenemos".
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