Calle Real de Santa Cruz de La Palma.
La Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife está buscando en La Palma empresas dispuestas a ampliar su actividad en otra isla. Para seleccionar a las mejor preparadas, el próximo lunes arranca el Plan Test-Pyme, siete días para poner a prueba el negocio y conocer hasta qué punto está listo para crecer con éxito en el mercado canario.
Éste es el reto que la Cámara de Comercio, a través de su Delegación en La Palma, ha puesto en marcha dentro del III Programa de Regionalización que la entidad cameral desarrolla junto a la Consejería de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno autonómico. Según el presidente de la Delegación de la Cámara de Comercio en La Palma, Isael Castro, "esta iniciativa representa una oportunidad de oro para el tejido empresarial de la Isla, ya que le abre la posibilidad de crecer y de aumentar su competitividad más allá de los límites de La Palma y con mayores garantías de éxito".
Los empresarios palmeros que quieran poner a prueba su negocio sólo tienen que elegir uno de los siete días del Plan Test-Pyme, (entre el 29 de noviembre y el 3 de diciembre y los días 9 y 10 este mismo mes) para apuntarse y recibir en la propia empresa un consultor que, a través de un sencillo test y con los datos básicos de la empresa, elaborará un diagnóstico sobre la capacidad de la empresa para poder dar, con éxito, el salto a otra isla.
Los test de capacitación son totalmente gratuitos y la selección se llevará a cabo por riguroso orden de inscripción. Para participar sólo hay que ponerse en contacto con la Cámara de Comercio a través del correo electrónico lapalma@camaratenerife.com o nbrito@camaratenerife.com o contactar con la Delegación de la Cámara en Santa Cruz de La Palma en el 922-412-196 o la responsable del Programa, Noemí Brito, en el teléfono 922-100-400.
Todo son ventajas
Entre los beneficios de ser una de las empresas seleccionadas para el Programa de Regionalización está la posibilidad de contar, sin coste alguno, con un consultor externo para ayudar a comercializar los productos y servicios del negocio en nuevos puntos de las Islas, además de beneficiarse de un plan de formación especializado para los directivos de la empresa.
Según Isael Castro, el Programa de Regionalización es una medida muy positiva para ir limando las barreras estructurales y los condicionantes impuestos por la insularidad y la fragmentación territorial del Archipiélago, ya que, además, favorece el intercambio de bienes y servicios en un mercado regional más cohesionado y la capacidad de crecimiento del tejido empresarial de La Palma, que sufre además los efectos negativos de la doble insularidad".
Saltar las barreras
A pesar de que el 80% de gerentes y directores de las empresas canarias están dispuestos a abrir sucursales en otras islas, según lo refleja un Estudio elaborado por las Cámaras de Comercio de Canarias, la realidad es que sólo un 16% del tejido empresarial del Archipiélago está desarrollando su actividad en más de una isla.
La fragmentación del territorio y el sobreesfuerzo económico que implica a la hora de desarrollar cualquier tipo de actividad empresarial en distintos puntos de la geografía insular es uno de los factores que limitan las posibilidades de crecimiento de los negocios dentro de la Comunidad. A esto se suma el hecho de que el 94% del tejido empresarial canario está compuesto por pymes y micropymes con plantillas que no alcanzan los diez trabajadores y una estructura económico-financiera que, en muchas ocasiones, resulta insuficiente para afrontar los gastos adicionales que genera, durante los primeros años, la incursión en cualquier mercado nuevo.
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