Como todo lo que se indica en estos tiempos es que la situación viene provocada desde el exterior, mientras aquí la mayoría estamos aprendiendo a ahorrar, se hace necesario presentar o recordar algunas medidas que tienen que venir acompañadas de otras de índole social que enunciaré en un próximo artículo.
1) Establecer prioridad absoluta en los trámites y aprobación de cualquier licencia de obra, apertura o similar que se tramite en los ayuntamientos. Nadie entiende el retraso de determinadas licencias.
2) Que todos y cada uno de los trabajadores de las administraciones públicas dediquen media hora diaria de su tiempo íntegramente a la generación de riqueza (empleo). Pero ¿Cómo? ¿Cuáles serían sus tareas? La respuesta sería que cada negociado se organice según la capacidad de las personas que lo componen, pero con una clara y decidida orientación hacia el empleo, sea o no sea la competencia de la administración correspondiente. El resultado no debería exceder de 3 líneas por día, donde se indique el "Cómo", y nunca el "Hay que". Por ejemplo, se deberán de indicar las tareas concretas a realizar que respondan a la pregunta ¿Cómo impulsar las medianías?, en lugar de indicar Hay que impulsar las medianías.
3) Que el pequeño comerciante, el pequeño empresario realice microinversiones, entre 500-1.000€ que aporten a su negocio una diferenciación, una mejora que lo haga más competitivo, desde un software de gestión, que siempre les permitirá integrarse en las nuevas tecnologías, hasta un cambio de escaparate, nuevos productos,… Cualquier elemento nuevo que les diferencie.
4) Como uno de los principales problemas que se indican para la mejora de la economía es la falta de crédito, teniendo presente que los bancos no están por la labor, las pymes y autónomos, con las ayuda de las corporaciones locales, deben de detectar y contactar con personas de probada solvencia económica para que éstas financien las empresas (a modo de Sociedades de Capital Riesgo pero con cuantías inferiores y a nivel local). Para ello los servicios jurídicos de las administraciones públicas a nivel insular y comarcal (no es necesario que se realice en cada ayuntamiento), deben de redactar y poner a disposición de los emprendedores y empresarios unos contratos que aseguren la devolución con sus intereses de las cantidades prestadas.
5) Que todos trabajemos y demos lo mejor de nosotros mismos en cada una de nuestras situaciones, desde el desempleado que tiene que tener claro en qué va a ser de utilidad al empresario, hasta el político que tiene que decidir cuál de sus decisiones va a enriquecer más a la población. No olvidemos que la causa de estos malos tiempos ha sido no pensar nunca en el bien común.
6) Los políticos de las administraciones locales están para tomar decisiones, coordinar, cambiar las normas y los convenios si fuera preciso. Pero no están para corregir textos escritos por funcionarios, ni limpiando las calles, ni empujando carrozas en las fiestas, ni innumerables tareas que a la gente de nuestros municipios nos gusta que hagan nuestros representantes públicos. Entre otras razones no pueden hacer esas tareas porque sus sueldos corresponden a tareas que requieren mayor cualificación. Por tanto, una de las decisiones que los políticos pueden tomar es exigir a los funcionarios pequeños informes donde se indiquen las ventajas y desventajas, siempre desde un punto de vista económico, social y ambiental, de las actuaciones a llevar a cabo por los ayuntamientos, para que estos tomen las mejores decisiones en función de los informes.
Archivado en:
Últimas noticias
Lo último en blogs
JoseTomas
"mismamente"
Leer más
Unoqueyaemigro
No puedo estar más de acuerdo con el punto 1)
Deberíamos tomar nota de una medida que se ha planteado en la Comunidad de Madrid para que las personas que presenten una solicitud de creación de empresa puedan iniciar inmediatamente su actividad, y que luego se les audite en cuanto sea posible, pero que no se haga esperar a nadie.
Sobre el resto de puntos, el que más me cuesta es el 2)
Si realmente los trabajadores públicos pueden dedicar cada día media hora de su tiempo a pensar cómo generar riqueza, igual es que sobra un 6%
¿No sería mejor que lo pensaran en su casa, y si se les ocurre una buena idea, que pidan una excedencia, monten una pequeña empresa, y si les va bien puedan crear pronto uno o dos empleos?
Creo que la creación de riqueza es responsabilidad del sector privado.
La responsabilidad del sector público es ser lo más eficiente posible, consumir la menor cantidad posible de recursos, y poner el menor número posible de obstáculos a la iniciativa privada siempre que esté dentro de la ley.
Esto es lo que pienso yo y soy consciente de que no todo el mundo estará de acuerdo.
El punto 4) me parece muy interesante, porque seguro que hay personas buscando en qué invertir sus ahorros, pero tengo dudas de que los servicios jurídicos de nuestras administraciones locales inspiren la confianza necesaria. Francamente, a mí ni la más mínima.
Señor Antonio, por favor no lo tome como una crítica porque me parece loable que se intenten aportar soluciones y me ha parecido interesante.
Leer más