La feria ganadera de Los Llanos mantuvo el nivel de otros años con una participación de 230 cabezas

La XIX Feria Insular de Ganado de Los Llanos de Aridane celebrada ayer sábado en el parque Conrado Hernández contó con la participación de 230 cabezas, una cifra  similar a la del pasado año pese a la crisis y la sequía que azota la Isla y que ha afectado a la alimentación y a la presencia de los animales. Sin embargo, pese a ello se pudieron ver ejemplares de una gran calidad porque el ayuntamiento premió este aspecto a la cantidad.

"Hemos primado los criterios para que hubiera más calidad que cantidad y la verdad es que los ganaderos han respondido y se lo agradecemos enormemente", manifestó la alcaldesa Noelia García que se mostró satisfecha con la alta participación en la feria, una de las más importantes que se celebran anualmente en la isla, la tercera del año, y que supone una ayuda importante para los ganaderos que no están pasando por su mejor momento.

El ganado vacuno (vacas, toros, becerros y novillos) predominó aunque también había cabras y ovejas pero muy poca cantidad.

La feria contó además con una interesante exposición agrícola en la que se podían ver las últimas novedades del sector en maquinaria, abonos y cultivos, o el etiquetado o envasado de plátanos o tunos, entre otros. Los quesos y vinos acogidos a las Denominaciones de Origen de La Palma tampoco faltaron a la cita y brindaron a los asistentes la oportunidad de degustar algunas de las exquisiteces de la tierra. En esta edición de la feria tampoco podía faltar el concurso insular de arrastre de ganado, una tradición que despierta el interés de grandes y chicos.

Pero, sin duda, uno de los momentos más emotivos de la jornada matinal se produjo con la llegada en procesión de San Isidro Labrador al recinto ferial, acompañado de la Reina de las fiestas de la Patrona y de los concejales del grupo de gobierno, vestidos de traje de típico. También acompañaron al santo en su recorrido desde la plaza de España hasta el parque, algunos consejeros del Cabildo y la senadora, vestidos también de típico. Momentos después el párroco bendijo a los animales.

Desde primera hora la afluencia de público fue muy importante a la feria aunque la Romería en honor a Nuestra Señora de Los Remedios congregó a cientos de personas, la mayoría vestidos de romeros. San Isidro Labrador, en su carreta de bueyes, presidió y marcó el ritmo de la comitiva en la que también participaron más de 60 carrozas, 9 de ellas tiradas por bueyes, y vehículos engalanados, así como numerosos grupos folclóricos.

La Romería, que en esta edición recuperó el esplendor del recorrido antiguo por el casco urbano con su marcado carácter típico, partió de la Avenida Eusebio Barreto y continuó por las calles de La Carrila, Calle Calvario y Calle Real hasta llegar a la Plaza de España donde hasta bien entrada la madrugada actuaron las orquestas Libertad, Ritmo y Changó. Balcones y casas engalanadas, ritmos folclóricos y buen ambiente fueron el el denominador común de la fiesta.