La producción de sabro, al borde de la extinción

La cosecha de uva de este año ascendió a 749.909 kilos, un dato que se aleja de la producción media del Consejo Regulador de la Denominación de Origen de Vinos La Palma que ronda el millón de kilos. Sin embargo, el aspecto más preocupante que ha dejado la vendimia de este año, que finalizó en octubre, es que la variedad sabro, que es única en la Isla ya que no se conocen sinonimias de esta variedad en otras zonas ni regiones del mundo, está al borde de la extinción porque la producción es alarmantemente pequeña. En 2010 se recogieron 1.634 kilos, en 2011 fueron 3.189 kilos y este año un total de 2.310 kilos, lo que representa el 0,30 % de la vendimia.

La vendimia comenzó el 15 de agosto en el Hoyo de Mazo, para finalizar en Fuencaliente con la recogida de la uva de malvasía a mediados de octubre, algo atípico esto último porque lo habitual es que finalizase a principios de noviembre en la subzona Norte, con la recolección de la variedad de uva Listán Prieto.

Las causas de este adelanto de cosecha se deben en parte, según el Consejo, a la sequía del invierno y a las frecuentes olas de calor en la temporada estival.

Los 749.909 kilogramos cosechados corresponden a un total de 586 viticultores inscritos en La Denominación de Origen de Vinos La Palma. El 44,6% del total de la uva recolectada corresponde a variedades de uva blanca frente al 55,40% que es de uvas tintas.

Por variedades, el Negramoll representa le 32,28% del total de la producción; el Listán Blanco el 28,79% ; Albillo el 10,63% ; Listán Prieto el 7,95% ; Almuñeco el 5,65% ; Listán Negro (3,59% ); Castellana (2,45% ); Malvasía (1,87% ); Vijariego (1,84% ); Bujariego Blanco (1,52%). Todas estas variedades, suponen casi el 97% de la producción total de la Denominación de Origen de Vinos La Palma de este año. El 3% restante lo componen variedades como el Sabro, el Gual, el Verdello, la Tintilla, etc.

La Denominación de Origen de Vinos La Palma se divide en tres subzonas de producción diferenciadas por las variedades, el clima, el suelo y los sistemas de conducción. Esto es así porque La Palma es muy singular debido a su orografía y por ello nos podemos encontrar viñedos al nivel del mar y a 1.400 metros de altitud.