Proponen una moneda local y una banca on-line para sortear la crisis y fortalecer la economía social

Proyecto Drago, así ha bautizado Carlos Pérez, palmero e informático de profesión, una iniciativa con la que propone la creacion de una moneda local y una banca on-line (Dragobanco) que promueve un desarrollo económico, más social y sostenible, por medios alternativos, y que esta tarde se presenta en un seminario on-line a las 19:00 horas.

"En el momento actual, con mucha gente preparada pero inactiva porque no accede al mercado laboral, planteamos una aplicación por la que estas personas puedan ofrecer sus servicios y que le puedan pagar con una moneda distinta al euro, que llamamos Drago. Vamos a utilizar como moneda de intercambio otra cosa, y para eso hemos creado un aplicación, Dragobanco, por la que cada persona que quiera entrar en ella puede ofrecer sus servicios y cobrar en una moneda diferente, más barata, porque por un euro obtendrás dos dragos con lo cual el poder adquisitivo sería el doble". Además también se podrá hacer trueque.

Pérez explica que de este modo se consigue que personas que ahora mismo no tienen ingresos ni actividad, puedan ofrecer sus servicios e intercambiarlos con otros. "Por ejemplo un carpintero que se ha quedado sin trabajo o que quiere tener unos ingresos añadidos, pues puede intercambiar su servicios por dragos, y con esos dragos puede comprar otros servicios y otros bienes de otras personas que estén utilizando la aplicación".

Se trata, aseguró, de una actividad social, que busca echar una mano a la gente de manera eficaz y con el menos coste posible, porque "los políticos no nos van a resolver nuestra situación, los grandes poderes económicos no van a resolver la situación, así que tiene que ser la gente de la calle la que tome iniciativas y ponga en marcha proyectos".

En un primera etapa, la moneda será virtual, y permitirá comprar y vender dentro de la aplicación, y a medida que se vaya consolidando podría a pasar a ser una moneda física.

"Hoy por ejemplo cada persona que asista al seminario on-line, a las 19:00 horas, va a tener 10 dragos de regalo y una hora del banco de tiempo, o, lo que es lo mismo, que en vez de elegir un drago elegimos una hora. Intercambiamos servicios en la moneda hora. Yo te hago una reparación de un mueble, he tardado dos horas en hacerlo y te voy a cobrar dos horas, la moneda es la hora, ese carpintero tiene dos horas con las que puede comprar otros servicios que estén en la aplicación".

El éxito depende de la participación

Carlos Pérez cree que se trata de un proyecto con muchas posibilidades porque hay gente muy preparada, con ganas de trabajar pero que están paradas. "Si confían en esta aplicación y en este proyecto y les parece interesante va a funcionar. El éxito depende del número de personas que interactúen, cuantas más personas participen más servicios se ofrecen, más productos se venden y se compran. Por ejemplo ya hay servicios para agricultura, ganadería, hay un chico que es mago, que puede hacer actuaciones en cumpleaños, hay un centro de medicina natural que también ofrece un consulta on-line gratuita para las personas que se apunten a la aplicación y las posibilidades son infinitas. Todo lo que se pueda ofrecer tiene cabida". Pérez dijo que en la ciudad de Vigo por ejemplo hay gente que vive con el intercambio de una aplicación similar.

Y es que este sistema no es nuevo, en España hay cincuenta monedas complementarias al euro que están funcionando en la actualidad, y en Europa hay un sistema parecido en el sur de Alemania, en Munich, con 650 comercios participantes que tienen un volumen importante de transacciones, o en la ciudad de Bristol, en Inglaterra.