Pedro Cruz, el director que quiere acercar el Parador a la población

Acercar el Parador de La Palma a la población, ese el objetivo que se ha propuesto su nuevo director, Pedro Cruz Díaz, un palmero que ha vuelto a su isla natal después de cuarenta años trabajando por todo el país en distintos paradores de la red. Su último destino fue el de las Cañadas pero su ilusión era regresar a La Palma y dirigir el Parador nuevo porque en el antiguo, en el de la Avenida Marítima, empezó a trabajar en 1973.

"Mi intención es acercar el Parador a la población, que no lo vean como algo exclusivo para unos pocos, sino que la gente acuda aquí a tomar un café o a comer. Porque parece que la gente solo viene cuando hay eventos especiales o cuando hay una visita especial y el Parador está abierto, tanto el restaurante como la cafetería, no solo para el cliente que está alojado sino también para el visitante".

Así que Pedro Cruz anima a los palmeros a visitarlo porque "es un establecimiento que oferta un buen servicio y calidad a unos precios razonables". "Con el servicio que damos y teniendo en cuenta que Paradores trabaja con  productos frescos, de calidad, donde se mima la elaboración y el atendimiento, no es caro comparado con cualquier otro lugar", recordando además que el Parador cuenta con amplios salones y medios audiovisuales para la celebración de reuniones, eventos, exposiciones, etc, que están a disposición de la población. "Quiero romper esa barrera que parece que existe y que nos separa de la sociedad porque hay quien piensa que para venir aquí hace falta frac y pajarita y no es cierto".

En cuanto al hospedaje, Pedro Cruz reconoció que quedarse en una cama del Parador posiblemente no sea distinto que hacerlo en otro establecimiento pero "el conjunto del establecimiento y de la atención es lo que lo hace diferente y hace que la estancia sea acogedora y agradable".

Ocupación y crisis

Preguntado por la ocupación actual, comentó que "ahora mismo estamos en temporada baja, después semana santa y hasta finales de junio, que vuelve a aumentar, pero no nos está yendo del todo mal dentro de la situación económica que hay aunque está claro que mi misión es aumentar esa ocupación todo lo que se pueda".

"Tenemos touroperación, tenemos clientes particulares, tenemos empresas que parece que vuelven otra vez a retomar a La Palma como destino para realizar pequeños congresos, reuniones, simposium, todo eso nos hace tener esperanzas de que vamos saliendo del bache". Y es que con la crisis, reconoció, se nota una cierta ralentización de las reservas. De la clientela del Parador, el 50% son españoles y la otra mitad extranjeros.

Un Parador a la altura

En cuanto al pregunta de si el Parador de La Palma está a la altura de los demás, Pedro Cruz indicó que en cuanto al servicio y a la forma de trabajar, los paradores son todos iguales, lo único que cambia es el "envoltorio". "No es lo mismo el Parador de Sigüenza, que el de las Cañadas del Teide, y dentro de Canarias cada uno tiene su particularidad. El de La Gomera y La Palma se asemejan un poco, el de las Cañadas está a más de dos mil metros de altura y eso le confiere mucho encanto, y el de El Hierro, como yo digo, es la reserva espiritual de occidente. La diferencia es el envoltorio pero el contenido es el mismo: la misma vajilla, la misma cubertería, en muchos casos decoraciones similares y después determinados productos se compran al mismo proveedor".

Crear la necesidad

Respecto a la conectividad y los vuelos, un asunto que tanto preocupa al sector turístico, Pedro Cruz dijo que considera que los organismos que tienen competencias están haciendo un esfuerzo grande para mantener las conexiones y aumentarlas, añadiendo que "nosotros nos tenemos que centrar en mejorar nuestros establecimientos, nuestros servicios y la atención para crear la necesidad de que el cliente tenga que visitar La Palma".

Desde su punto de vista es necesario mejorar la calidad del destino para que tenga "tirón", y para que el visitante tenga la necesidad de venir a la Isla. "Todo lo que sea ofrecerle al visitante diferentes posibilidades es positivo para que diferentes segmentos de mercado nos visiten y se incrementen los vuelos y se mejoren las conexiones". Entre esas posibilidades, el director del Parador no ve mal, por ejemplom que La Palma pueda contar con uno o varios campos de golf.