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Economía
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La peor cara de la crisis

Los trabajadores de Ruiz Romero llevan cuatro meses sin cobrar y sin prestaciones

  • Están viviendo un calvario y piden al menos un entrega a cuenta para vivir

Los 42 trabajadores de la empresa Ruiz Romero llevan cuatro meses sin cobrar y exigen una solución porque están desesperados.

El drama de la crisis sigue mostrando su peor cara y esta vez los afectados son los 42 trabajadores de la empresa Ruiz Romero que se han concentrado hoy a las puertas de la oficina que tiene en la capital para denunciar que llevan cuatro meses sin cobrar y que su situación es insostenible.

La empresa, según ha explicado Francisca Fernández, de CCOO, se presentó a un concurso de acreedores y a la misma vez presentó también una solicitud de un ERE extintivo para los 42 trabajadores, que ya venían de un ERE de un año, trabajadores que actualmente están dados de alta en la empresa, cotizando a la seguridad pero que no están prestando servicio. De hecho, "todos los meses la empresa les manda, a través de un administrador concursal, un documento en el cual les exonera de prestar el servicio pero eso no significa que no les deba los salarios, les está adeudando cuatro mensualidades desde el mes de marzo, más la paga extraordinaria", en total unos unos 5.000 euros de media por cada trabajador.

Debido a esta situación, los trabajadores están viviendo un calvario personal ya que sin cobrar y sin ninguna prestación, se han visto obligados a pedir ayuda a familiares, a Cáritas, y hasta entre ellos mismo se prestan dinero. "Es una situación insostenible porque esto acaba con la vida de cualquiera. Es muy duro", aseguró Francisca Fernández que confesó que "ya no sabemos lo qué hacer y lo que nos tememos es que el juzgado mercantil se pare en agosto por las vacaciones sin tomar ningún tipo de decisión ni medida y lleguemos a septiembre así". Precisamente para evitar que esta situación no se prolongue en el tiempo "había que salir a la calle, porque están desesperados" y lamentó que la empresa no haya dado la cara, abriendo las abiertas "aunque fuera para decir que no tiene dinero y máxime cuando los trabajadores no le están pidiendo toda la cantidad de golpe sino una entrega a cuenta".

La sindicalista aseguró que ya han agotado todo el procedimiento que se tiene que llevar a cabo relativo al ERE, las reuniones previas, consultas y que desde el 21 de junio presentaron las últimas alegaciones pero "no tenemos respuesta de la juez mercantil". Dejando claro, eso sí, que la empresa tiene a todos los trabajadores dados de alta con lo cual aunque tenga solicitado un ERE extintivo, mientras que no se apruebe, tiene que cumplir con los trabajadores, pero el problema es que no lo está haciendo.

La empresa sobre el dinero, según ha manifestado la sindicalista, no responde y sobre la decisión de la extinción de los contratos está pendiente de lo que diga el juzgado mercantil, pero , advirtió, "mientras no se pronuncien los juzgados la empresa tiene una deuda con estos trabajadores que llevan toda una vida con ellos y se les olvida".

Los trabajadores no descartan nuevas movilizaciones para exigir que se resuelva esta situación.

 

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