La película del Alma de Tacande revive la leyenda en El Paso, que estudia comprar la casa

Al más puro estilo “hollywodiense” se presentó en la Casa de la Cultura Braulio Martín de El Paso película El Alma de Tacande, que todavía no ha llegado a los cines y sin embargo ya ha recibido numerosos premios en distintos festivales internacionales. La mayoría de las actrices y actores del film asistieron a la presentanción, al igual que el director y productor Antonio Manuel Fernández, que fue uno de los que más se emocionó con el estreno de la cinta en el municipio pasense, porque recordó que “de El Paso salió la historia y a El Paso vuelve”.

Antonio Manuel destacó además en su intervención antes de que se proyectara la película, que había costado mucho trabajo y esfuerzo hacerla, pero dijo que suponía una “satisfacción” presentarla por primera vez “en nuestro pueblo” porque era “nuestra ilusión”. “Estamos como pasenses muy orgullosos de que esta leyenda haya caminado por todo el mundo, por países tan dispares de América del Norte y del Sur, India, Francia, Italia, etc…, paseando el nombre de La Palma y de El Paso”, manifestó.

El alcalde pasense, Sergio Rodríguez, agradeció que un pasense decidiera llevar al cine una de las leyendas “más misteriosas y populares” de La Palma y de Canarias, el Alma de Tacande que “a lo largo de tres siglos ha sido tratada por distintos medios de expresión artística y que vuelve esta noche a donde ocurrieron los hechos, en su versión cinematográfica”.

“Es el debut de nuestro paisano Antonio Manuel Fernández en el gran formato y constituye- dijo-, una efémeride local de primera magnitud porque aunque se ha rodado en diversos lugares, casi íntegramente en La Palma, ha sido principalmente en nuestro municipio y, por supuesto, en los lugares donde ocurrieron los hechos que, recogidos por relaciones orales y romances, han pervivido en todo su rigor hasta nuestros días”. Rodríguez destacó igualmente la valentía del cineasta por hacer realidad la película, así como la colaboración de instituciones y particulares por una “ilusión que ya tiene imagen y sonido y que esta avalada, recordó , por una veintena de premios y menciones”.

Actrices y actores de la cinta.

El alcalde aprovechó además su intervención en el esperado estreno para anunciar que “la trascendencia y popularidad del suceso histórico que acabó entre las mejores leyendas del siglo XVII de España y América”, ha llevado al grupo de gobierno que preside a “estudiar la posibilidad de adquirir la casa de Tacande y el terreno que la entorna para ponerla en valor difundiendo la historia y también como recurso cultural y turístico”. Sería, indicó, “un nuevo incentivo a las ofertas singulares que desde la naturaleza, el patrimonio artístico y la cultura popular ofrece El Paso, y hasta hoy una alternativa única en Canarias por su misterio y originalidad”.

Este anuncio se convirtió en uno de los momentos importantes de la noche, aunque el protagonismo, como no podía ser de otra manera, lo tuvieron sin duda el elenco de actrices y actores de la película que subieron al ascenario hasta en dos ocasiones junto con el director, además de la primicia que dio el presentador del acto de que la banda sonora de la cinta había sido preseleccionada para los Óscar.

Entre los invitados, la mayoría vestidos de etiqueta que desfilaron por la alfombra roja y por el photocall, había gente de la cultura, políticos y amigos del cineasta que vio así cumplido su sueño de presentar El Alma de Tacande en el municipo donde nació la leyenda.

«Sucedió en treinta de enero, allá en la remota etapa de mil seiscientos veintiocho un hecho que al orbe pasma», relata el romance de la aparición del Alma de Tacande, en el actual municipio de El Paso.

Durante siglos el pueblo repitió los versos y fue creciendo, entre la incredulidad de unos y el temor de otros, una de las más bellas leyendas canarias. Cuentan que durante ochenta y siete días el Alma de Tacande deambuló su pena y su pecado. Se presentaba en la casa de la hacienda de Tacande a arrullar a un niño y la cuna se movía sola, se oían dulces cantos y voces que procedían de persona no visible… y los desconocidos lloros de un niño recién nacido. Otras noches se escuchaban tamborcitos, panderos y castañuelas y cantaban voces de decenas de mujeres invisibles al son del ancestral villancico a lo divino: «María lo envuelve, José lo arrulla; | por ser carpintero, el niño no tiene cuna. | María lo envuelve en sus lindos cantares».