Taño solicita a Costas la paralización cautelar de las obras de la estación de bombeo

La presidenta del Cabildo, Guadalupe González Taño, ha solicitado a la Dirección General de Costas la suspensión cautelar inmediata de las obras de la estación de bombeo iniciadas hoy en la glorieta de Blas Pérez González de Santa Cruz de La Palma porque "no tienen autorización ni del Cabildo ni del Gobierno de Canarias". Según explicó la presidenta en rueda de prensa, al ser una obra que se realiza en una carretera que es de titularidad del Gobierno, y gestionada por la Corporación insular, debe contar con la previa autorización de las mismas y no la hay en ninguno de los dos casos. Aseguró que tampoco hay informe de tráfico y que su continuidad puede ocasionar un daño irreparable a la ciudad y a la Isla porque "una fuente se puede sacar pero una estación de bombeo es problable que no se pueda cambiar en 20 o 30 años"

La presidenta dijo además que no está de acuerdo en que una estación de aguas residuales se ubique a la entrada de la ciudad porque no es la mejor tarjeta de presentación para los miles de cruceristas que vistan la capital, habiendo otras alternativas. "No estamos de acuerdo ni con las firmas ni con el fondo y por eso he pedido la suspensión cautelar ya que he visto que han empezado las obras con la retirada del césped por parte de los obreros".

González Taño anunció además que si en los próximos días cuenta con los informes pertinentes no dudará en parar las obras, lamentando que en ningún momento desde el Ayuntamiento se haya informado al Cabildo de este asunto que afecta no solo a Santa Cruz de La Palma sino a toda la Isla.

La presidenta insular manifestó durante la comparecencia ante los medios que entendía que había una negociación para cambiar la estación de bombeo o "mamotreto" de sitio ya que es "absolutamente inadecuado para construir una instalación de estas características". Según indicó, en virtud de ello y de que "se nos había informado de que las obras ahí no se iban a iniciar hasta mayo o junio del año que viene, nosotros estábamos esperando a que se fuera trabajando por parte del Ayuntamiento en esa línea pero lo cierto es que al ver que se inician las obras, pues hoy están los obreros empezando a retirar el césped y ayer se valló la zona, esta mañana solicité a la Consejería de Infraestructuras del Cabildo que me informara de la autorización que se ha dado para la realización de esta obra, porque es una rotonda que está delegada al Cabildo, y no existe autorización y no se ha informado previamente de que se iba a llevar a cabo. Y además cuando nos hemos puesto en contacto con el Gobierno canario, porque la carretera de de titularidad del Gobierno de Canarias, tampoco ha dado autorización".

La presidenta teme que con esta actuación se pueda producir un "daño irreparable" a la ciudad y a la Isla, pues recordó que al Puerto de Santa Cruz de La Palma está previsto que arriben este año 214.000 cruceristas en 162 escalas, que el turismo de cruceros crece todos los años en un 12 y un 15 % anual, lo que significa que es un sector económico que está siendo muy importante para la Isla, que está moviendo mucha economía, lo que significa que es "absolutamente incomprensible para cualquier ciudadano y para cualquier institución que la bienvenida que le demos a los cruceristas en esta Isla sea una estación de aguas residuales. Creo que es una perspectiva que no es lógica" y recordó que una fuente se puede sacar pero una estación de bombeo no, y es probable que los próximos 20 o 30 años no se pueda cambiar de sitio.

González Taño explicó que hasta ahora no habían querido entrar a valorar la ubicación de la estación porque "entendíamos que se estaban llevando a cabo gestiones para que no se ubicase a la entrada de Santa Cruz de La Palma sino en una zona no tan visible, pero no es así". "Entendíamos que se estaban buscando alternativas pero al ver que se han iniciado las obras, solicitar el expediente y comprobar que no hay comunicación previa de las obras ni al Cabildo ni al Gobierno insular, ni existe autorización para que esas obras se desarrollen en una carretera que está delegada al Cabildo y que es propiedad del Gobierno, es por lo que hemos solicitado la paralización de los trabajos a Costas para discutir cuál es el futuro de esta obra y si existen alternativas, que entendíamos que existen, para evitar que produzca una daño irreparable a la ciudad y a la Isla".

La presidenta recordó por último que en los proyectos futuros, la Avenida Marítima y la playa ocupan un lugar estratégico en la ciudad, por lo que la avenida será un pulmón económico de la capital y de la Isla y "la Dirección General de Costas debe reconsiderar el inicio de las obras, sentarse a hablar" porque "una decisión que va a condicionar el futuro de la Isla de los próximos 20 o 30 años no puede tomarse sin que se busquen alternativas".