Los centros de visitantes del Tendal y Cueva de Las Palomas entrarán en funcionamiento en breve y serán gestionados por Tragsa

El presidente del Cabildo, Anselmo Pestana, espera que en breve (en lo que queda de año o en enero como muy tarde) entren en funcionamiento los centros de visitantes del Parque Arqueológico del Tendal y de Cueva de Las Palomas, en Las Manchas, para lo que ya se está contratando el personal.

Estos dos equipamientos serán gestionados por la empresa pública Tragsa, que también se encargará, mediante una enomienda del Cabildo, del equipamiento del Centro de Visitantes del Roque, cuyas obras han sido recibidas en fechas recientes por la corporación insular. La empresa tendrá once meses para ejecurtar dicho equipamiento, lo que significa que el esperado centro situado en la cima de la Isla Bonita tampoco abrirá sus puertas este año.

Por lo que se refiere a los centros del Tendal y Cueva de Las Palomas, el camino no está del todo despejado para su puesta en servicio ya que Intervención del Cabildo ha puesto pegas a que se adjudique su gestión a Tragsa.

Centro de Interpretación Cueva de Las Palomas.

Anselmo Pestana ha explicado que el motivo del reparo de intervención ha sido por criterios de legalidad, “hay una discrepancia entre el servicio gestor y la intervención, que entiende que algunos aspectos no se ajustaban a la legalidad”.

Sin embargo, señala que “el servicio nos informa que sí cumple la legalidad, con la conformidad del secretario de la corporación en el mismo sentido, y también hemos recibido asesoramiento externo de un abogado del estado; así que vamos a ver los términos del reparo, se va a preparar por los técnicos del servicio una propuesta que se traerá a Consejo de Gobierno y si no es una cuestión competencia del pleno será este presidente quien salve el reparo de la intervención, si los argumentos nos convencen”.

Estas tres actuaciones son un claro ejemplo de lo lento que avanza todo en La Palma, puesto que está a punto de acabar otro año sin que ninguna esté en marcha. Se trata de equipamientos pensados para que sean un referente turístico y aporten valor añadido a la isla, algo que de momento no se ha conseguido.