Los Llanos cambia la denominación de la calle Blas Pérez González por Viudas Blancas

Blas Pérez González hizo más por La Palma y los palmeros que todos los que ocupan y han ocupado cargos políticos bien remunerados en ayuntamientos, cabildos y parlamentos, incluida doña Maria Victoria. Con leyes de memoria histórica podrán cambiar nombres de calles, pero no ocultar la verdad ni transformar los hechos. Por cierto, Francisco Largo Caballero, dirigente del partido de doña María Victoria, fue ministro de una dictadura, tuvo mucha responsabilidad en el comienzo de la guerra civil y en muchos crímenes que se cometieron antes y durante la misma; y sin embargo, hay calles con su nombre y tiene un monumento en Nuevos Ministerios (en Madrid). Otro tanto podría decirse de otros muchos “demócratas pacifistas” como Juan Negrín, al que los propios socialistas defenestraron hasta que fue rehabilitado en 2008 por el inefable ZP, otro demócrata que sirve (seguramente gratis) a democracias tan ejemplares como la de Maduro.
Yo me creeré la sinceridad de los ardores democráticos de personas como doña María Victoria cuando denuncien a este tipo de personajes, aunque pertenezcan a su partido. Que algo sea impuesto por una ley, lo hace legal, pero no legítimo. Y las leyes, por mucho que se promocionen y se rieguen con subvenciones, no cambian los hechos históricos.
Y quien quiera opinar con conocimiento de causa, que se informe de los hechos y no se limite a recurrir al socorrido apelativo de “fascista”, que para eso ya tenemos intelectuales como Carmen Calvo, Rufián e Irene Montero, que constantemente pretenden tratarnos como a borregos.
Yo, mientras pueda, no me dejo.