El Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, único municipio de La Palma que cuenta con el “Programa de apoyo a la integración de la vivienda para colectivos con dificultades”, a través de la iniciativa impulsada por la Asociación Provivienda, ha facilitado la renovación de contratos de aval con los propietarios y los acuerdos de colaboración con las familias para que tanto inquilinos como propietarios se encuentren protegidos durante el estado de alarma y el confinamiento provocado por el COVID19.
En comisión informativa la técnico de Provivienda ha hecho balance de las actuaciones realizadas durante la situación de pandemia a petición del concejal de Izquierda Unida Canaria, Felipe Ramos.
En la intervención se ha explicado que más de la mitad de las familias que han sido atendidas a través de este Programa se han visto en situación de desempleo, ERTE y/o reducción de la jornada laboral por lo que se les ha informado y asesorado para que accedan a la bonificación y a la moratoria en el pago de las rentas y suministros básicos de la vivienda, a las ayudas al alquiler por el COVID 19, al Ingreso Canario de Emergencia (ICE), al Ingreso Mínimo Vital (IMV) y a otras ayudas que han puesto en marcha las administraciones públicas y/o privadas.
Además, en la actualidad se está realizando el seguimiento y acompañamiento social a un total de 23 familias cuyo perfil es muy diverso y responde a características entre las que las que podemos encontrar parejas con o sin hijos; familias monoparentales con hijos/as a cargo; personas solas y familias que comparten piso, con un rango de edad media de 50 años y con estudios Primarios o Bachillerato; que en muchos casos están desempleadas o tienen contrataciones laborales eventuales, donde la media de ingresos es de 640,30 euros mensuales.
Muchos de estas personas inquilinas, dadas sus condiciones socio-económicas, no podrían asumir las actuales rentas de alquiler de mercado sin la mediación de un servicio de este tipo y sin el apoyo de los Servicios Sociales municipales del Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, ya que, entre ellos se encuentran personas perceptoras de Prestación Canaria de Inserción (PCI), trabajadores temporales, autónomos, perceptores de prestaciones por desempleo, etc.
Actualmente, en el contexto de crisis social y económica provocada por la crisis sanitaria, encontrar viviendas disponibles para su alquiler en el municipio de Los Llanos de Aridane se hace tarea complicada, a pesar de que el municipio cuenta con un número significativo de viviendas vacías. Algunos propietarios no quieren alquilarlas por el miedo a los posibles impagos de renta, y quienes las alquilan lo hacen a precios muy elevados.
Desde el Ayuntamiento aridanense, la alcaldesa Noelia García Leal, recuerda a todos aquellos propietarios que quieran alquilar sus viviendas que “contamos en el Ayuntamiento con este Programa de apoyo a la integración de la vivienda para colectivos con dificultades y que a través de la iniciativa impulsada por la Asociación Provivienda se garantiza tanto para los inquilinos como para los propietarios el acompañamiento durante toda la vigencia del contrato”.
Por su parte la concejala responsable del área de Vivienda, Elena País recuerda que “programas como éste son una iniciativas directas de intervención socio-residencial que tienen la finalidad de contribuir a la integración de las personas o familias con dificultades de acceso a una vivienda digna.
Una muestra de la actual situación en materia del alquiler son los altos precios que hay en el municipio. Según el Índice de alquiler de vivienda, publicado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el precio medio del alquiler en Los Llanos de Aridane asciende a 592,00 €/mes para una vivienda con una superficie media de 80 m2. No obstante lo anterior, en diversos anuncios publicados en varios portales inmobiliarios, se han encontrado viviendas en el municipio cuyos precios de alquiler oscilan entre 540,00 y 1.400,00 euros/mes.
Canarias es la 5ª Comunidad Autónoma, solo por debajo de Cataluña, Madrid, País Vasco y Baleares, donde más se destina del salario al pago del alquiler. Esto tiene como consecuencia que muchas familias no lleguen a final de mes, puesto que a pesar de tener trabajo, sus ingresos son insuficientes para asumir los elevados precios del alquiler.
Por otra parte, otro aspecto importante a tener en cuenta es la capacidad económica de las familias para el pago de la vivienda. En este sentido, algunos datos del estudio “Relación de salarios y vivienda en alquiler en 2019”, publicado recientemente por el portal “Fotocasa” indican que la población en Canarias destinó en 2019 el 43% de sus ingresos a pagar el alquiler de su vivienda, 10 puntos más que en el año 2018 (33%). En los últimos cinco años (desde 2015 a 2019), el importe del sueldo mensual destinado al pago del alquiler ha crecido 14 puntos de media en Canarias. Así, en 2015 los canarios debían destinar el 29% de su nómina mensual para pagar un piso de alquiler de 80 metros cuadrados, un 31% en 2016, un 33% en 2018, hasta llegar al 43% de 2019.
Canarias es la 5ª Comunidad Autónoma, solo por debajo de Cataluña, Madrid, País Vasco y Baleares, donde más se destina del salario al pago del alquiler. Esto tiene como consecuencia que muchas familias no lleguen a final de mes, puesto que a pesar de tener trabajo, sus ingresos son insuficientes para asumir los elevados precios del alquiler.
De cara a la continuidad del Programa, se ha de seguir insistiendo en que los propietarios particulares pongan a disposición sus inmuebles desocupados para el alquiler mediante este servicio, ofreciéndole los incentivos de los que el Programa dispone.
En informe concluye que “atendiendo a una determinada demanda de vivienda existente en el municipio, es decir, a personas o familias con ingresos, aunque no suficientes para costear una vivienda en alquiler, y a aquellos que carecen de avalista o de capacidad económica para asumir el pago de la renta del primer mes y/o la fianza arrendaticia. También se ha detectado otros perfiles a los que la respuesta a la carencia de vivienda no puede ser un Programa de estas características, ya que no tienen ningún tipo de ingreso o sus ingresos son tan bajos, que les resulta imposible pagar la renta y los gastos que supone mantener una vivienda. Esta demanda ha de ser atendida a través de otras alternativas residenciales, tales como la promoción pública de viviendas sociales en alquiler, y con el aumento de las ayudas municipales para el pago de las rentas de alquiler”.
Finalmente destaca que “Las necesidades de cada persona o familia son distintas y, por tanto, se han de generar distintas respuestas adecuadas a cada una de ellas”.
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