El Ayuntamiento pide a Puertos la cesión formal del suelo donde se ubica la principal bolsa de aparcamientos de la ciudad

Antes, en la zona donde ahora está la playa de la “siudá”, se podía aparcar fácilmente, se cruzaba la avenida y ya estabas delante de las tiendas. También había más calles con aparcamientos, pero ahora son peatonales…, pues que los peatones compren en las tiendas ubicadas en esos lugares si quieren, yo no.

Ahora es casi imposible aparcar delante de los negocios y hay una playa enorme vacía o con cuatro personas como mucho. Dicen que esa playa evitará que el mar entre en la “siudá”, pero cuando venga un temporal de los de antes creo que es playa irá a parar a la antípoda.

Luego está el problema del turismo, todo lleno de coches de alquiler ocupando aparcamientos gratuitos. El dinero de esos coches supongo que se va fuera de la isla. Los turistas compran en los supermercados y se hacen ellos mismo la comida, pocos van a los restaurante o harán grandes compras, imagino yo.

Lo peor de todo es que los propios dueños de los negocios y los empleados ocupan los aparcamientos libres, o sea, el dueño del negocio aparca su coche delante de la tienda y luego que el cliente busque aparcamiento lejos y camine hasta la tienda, no te digo, espera sentado a que yo vaya caminando a la tienda a comprar. Encima llega el cliente y lo miran con mala cara, como si le estuvieran haciendo un favor vendiéndole las cosas. Muchos comerciantes palmeros no durarían una semana en las grandes ciudades europeas sin irse a la ruina, pienso yo.

¿Hay aparcamientos libres y gratuitos justo delante o dentro mismo de las tiendas? pues entonces compro allí y de lo contrario que compre Rita la cantadora. Casi siempre compro en el Lidl, Mercadona, Worten de Breña Alta y en alguna tienda de los chinos si hay aparcamientos justo delante de las tiendas. En las tiendas que tienen delante zonas azules de pago o que tienen los aparcamientos ocupados ya no compro ni por asomo.

Si hay que aparcar para pagar que aparque otro, yo no pago por aparcar, antes prefiero estar horas dando vueltas y gastar muchos litros de gasolina que poner un céntimo en las cajas registradoras de los parquímetros, o sea, quien quiera dinero que trabaje.

Hace mucho tiempo que no voy a “la siudá” porque como sé que voy a tener problemas para aparcar justo al lado de los sitios, pues me voy a otro pueblo y así de camino evito respirar la contaminación de la planta eléctrica, de las turbinas de los aviones y las chimeneas de los cruceros, bueno, que los cruceros de momento ya no vienen.