El Cabildo de La Palma, a través del Área de Acción Social, Igualdad, Diversidad y Juventud del Cabildo de La Palma, dirigida por Nieves Hernández, ha abonado un total de 359.793,87 euros para sufragar los gastos de mantenimiento de las plazas de la residencia y centro de día de mayores en situación de dependencia en el municipio de Puntallana.
Para la consejera del área, Nieves Hernández, “este es un ejemplo más del compromiso del actual equipo de gobierno con las corporaciones municipales para dar soporte y apoyo a las personas mayores dependientes que necesitan acogerse a este tipo de centros para promocionar su autonomía y recibir una atención integral”.
El abono se realiza a través del convenio entre el Cabildo y el Ayuntamiento de Puntallana, para la gestión de las plazas insulares de sociodependencia. Del total, 315.687,04 euros se destinarán a la residencia de mayores, mientras que 44.106,83 euros son para al centro de día.
Esta iniciativa se enmarca en la política de colaboración con los ayuntamientos de la isla, que han ido recibiendo este tipo de subvenciones, como las concedidas recientemente a los centros residenciales de la Villa de Mazo o Fuencaliente.
Se trata de recursos sociosanitarios de tipo residencial y de gestión municipal con plazas insulares concertadas en los que se presta alojamiento a personas mayores con grado II o III de dependencia reconocida y que por causa de deterioro físico o mental, requieren una actuación básica, cuidados médicos y de enfermería, y cuya situación de vida digna no pueda ser mantenida en su domicilio.
Supongo que pronto todo ese dinero se destinará a alojar a los inmigrantes ilegales y los canarios tendrán que emigrar al continente africano, pero luego seguramente no los dejarán entrar porque el buen rollo se acaba afuera de las fronteras españolas.
Primero están los inmigrantes ilegales, luego los turistas y después los canarios.
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Pacopepe
Para algo fui alcalde y hoy vicepresidente. Barro para mi casa como hacen muchos. Otros en cambio, no barren nada para su casa pero se desviven para barrer a para los de al lado.
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