Detienen a los padres de una niña de dos años por las lesiones que sufrió la menor en un accidente de circulación

La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha detenido a los padres de una niña de dos años acusados de un delito de lesiones por imprudencia grave, como consecuencia de un accidente de circulación en la carretera LP-1 (circunvalación norte de La Palma) a la altura del punto kilométrico 88,900, consistente en una colisión frontal entre dos vehículos.

Uno de los vehículos, un turismo de alquiler, iba ocupado por ambos progenitores y su hija de dos años, quienes se encontraban de vacaciones en la isla. Los tres tuvieron que ser evacuados al Hospital General de La Palma tras producirse la colisión frontal contra el otro vehículo, cuyo conductor resultó ileso.

Una vez que los agentes de la Guardia Civil iniciaron la investigación del grave accidente, detectaron que el Sistema de Retención Infantil (SRI) donde debía ir sentada la niña “no era usado cuando se produjo el accidente”, sospechando que la menor iba sentada en el asiento trasero izquierdo, entre su madre y el cinturón de seguridad, conforme a las lesiones exteriores que presentaba inicialmente.

Un día después del accidente, tras realizar los agentes un seguimiento de los heridos, se recibió información relacionada con la niña, que había sido trasladada en estado grave en helicóptero a Tenerife, donde fue intervenida quirúrgicamente en el Hospital Universitario por el Equipo de Cirugía Pediátrica, ya que presentaba heridas de carácter grave: politraumatismos, fracturas costales, hematomas varios y neumotórax, teniendo además que realizarle una esplenectomía.

Conforme a lo expuesto, y tras el informe médico, al tratarse de un colectivo vulnerable o de especial protección y teniendo en cuenta la infracción del deber de cuidado asociado a la infracción grave a la Ley de Seguridad Vial, se procedió a la detención de los padres “por ser los responsables de las lesiones producidas a su hija por imprudencia grave, confirmando que la madre sentó a su hija con ella, poniéndole por encima el cinturón de seguridad”. Esta acción, explica la Benemérita, es extremadamente peligrosa ya que, en caso de colisión, el cuerpo del adulto presiona fuertemente al del menor que es a su vez parado por el cinturón de seguridad pudiendo provocar lesiones graves e incluso la muerte.

*El uso de sistemas de retención infantil reduce en un 75% las muertes y en un 90% la lesiones en caso de accidente. Aun así muchos niños y niñas viajan todavía sin la debida protección. Además los SRI, no son sólo recomendables, son obligatorios.

Este delito puede suponer, en atención al riesgo creado y resultado producido, la pena de prisión de seis meses a dos años y la privación del permiso de conducción de uno a cuatro años a los responsables.

Las diligencias instruidas fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Los Llanos de Aridane.