Borja Pérez: "El Ayuntamiento de Breña Baja es una administración solvente y con músculo económico y financiero"

El Ayuntamiento de Breña Baja cuenta con un estado económico “realmente solvente” a tenor de los indicadores en la auditoría realizada por el Gobierno de Canarias en relación al cierre del ejercicio 2021, previa al próximo reparto del Fondo Canario de Financiación Municipal.

La evolución de los citados indicadores arrojan en la practica totalidad de los casos una mejora respecto a los obtenidos en el ejercicio anterior (2020), según indica el Grupo de Gobierno en un comunicado. “El Ayuntamiento de Breña Baja es una administración solvente, sin grandes cargas y, por ello, con músculo económico y financiero. Por tanto con capacidad inversora, tal y como demuestran parámetros comparativos con otras corporaciones similares en Canarias. Hemos trabajado con ideas claras, demostrando que sin subir impuestos también se puede gestionar y mejorar infraestructuras municipales como redes de hidráulicas, alumbrado, etc. La auditoría demuestra que la gestión ha sido seria, más aún habiendo atravesado épocas tan complicadas a nivel económico y social”, destaca Borja Pérez, alcalde del municipio.

En el capítulo de inversiones sale “bien parada” la administración local, toda vez que el índice de inversión se situó en el 19,6 %, lo que supone un notable crecimiento respecto al ejercicio anterior (6,7 %) y por encima de la media de municipios canarios de similares características, cuyo índice se situó en el 2020 en el 17,9 %.

Igualmente positiva resulta la capacidad de realizar operaciones con fondos  propios. Es así en tanto la dependencia de subvenciones provenientes de otras administraciones es menor a la media de los municipios canarios de similares características.

En el apartado de cargas financieras a largo plazo, que analiza las cuentas al cierre de 2021, la auditoria establece deuda cero. No obstante,  el consistorio ha tenido que solicitar un préstamo durante el presente 2022 – que por lo tanto será reflejado en la auditoría del próximo año – para afrontar la indemnización a un particular derivada de una sentencia judicial contra una actuación urbanística del anterior gobierno local.

“Hemos trabajado con previsión y el préstamo se pagará en marzo 2023 en su totalidad, con lo cual apenas tendrá impacto en nuestras cuentas”, aclara el alcalde.

A esta buena posición económica, indican desde el Grupo de Gobierno, se suman otros indicadores que resultan positivos como el superávit en operaciones corrientes, que ascendió a 728.000 euros, o los incrementos de  ahorro bruto y neto.

“Este escenario de endeudamiento muy escaso, que sería de deuda cero de no haber tenido que afrontar el pago de la sentencia, nos permite un amplio margen de maniobra antes circunstancias sobrevenidas. Esta forma de trabajo ha sido marca de la casa para este grupo de Gobierno durante el presente mandato y, particularmente, creo que es un argumento de peso para que todos estemos  orgullosos y tranquilos con la gestión municipal”, concluye  Abel Pérez, responsable de Economía y Hacienda.